La exportavoz del PP en el Congreso de los Diputados Cayetana Álvarez de Toledo ha vuelto a faltar al honor del padre de Pablo Iglesias el mismo día en el que la política acudía a juicio para testificar por este motivo. La que fuera encargada primera de defender a la formación conservadora desde la Tribuna ha señalado ante los medios de comunicación que la situación era como “declarar que la Tierra es redonda”. En el mismo sentido, ha señalado nuevamente que “el FRAP es una organización terrorista” y que “una persona que militó en una organización terrorista puede ser calificada como terrorista sin que se atente contra el honor de nadie”.

Durante la jornada, Álvarez de Toledo se ha reafirmado por tanto en que el Frente Revolucionario Antifascista y Patriota (FRAP) es “una organización terrorista” y ha enumerado algunas de las ocasiones en las que tanto el que fuera líder de Podemos como su padre han reconocido la pertenencia del segundo a este grupo. En concreto, la diputada ha mencionado un artículo por la muerte del exdirigente comunista Santiago Carrillo, mensajes de redes sociales y una entrevista de Francisco Javier Iglesias en la que “dijo que perteneció” al FRAP.

18.000 euros por dañar su honor

Los motivos del juicio, que ha tenido lugar en Zamora en el día de hoy, fueron las graves acusaciones que la diputada vertió contra el demandante tanto en el Congreso de los Diputados, en mayo de 2020, como en una conversación con el diario ABC.

El padre del exvicepresidente ha reclamado 18.000 euros a Álvarez de Toledo por dañar su honor. Él mismo y su letrada han rehusado a hacer declaraciones a los medios de comunicación, a diferencia de la diputada, quien ha insistido en sus palabras. La diputada ha dictaminado asimismo que le parece “sorprendente” la estrategia empleada por la otra parte: “Han hecho algo sorprendente, como decir que eso eran bromas familiares, o algo más extravagante aún, como señalar que la entrevista de Público contenía errores que él no ha corregido más tarde”.

Para apoyar su defensa, la política ha advertido que si resulta condenada sería “una manera de legitimar al FRAP”, a cuyas víctimas ha apelado con ayuda de un libro de Carmen Ladrón de Guevara sobre la víctimas del terrorismo de extrema izquierda: “Es incompatible el orgullo frapero con el honor vulnerado”.

¿Qué fue el FRAP?

El FRAP fue una organización terrorista comunista creada en 1973, que operó contra el régimen franquista por la vía de las armas y que reconoció no estar a favor de la vía de Carrillo, quien optaba por el diálogo y la reconciliación nacional para poder avanzar en aras de la democracia.

El grupo se disolvió con la llegada de la democracia y fue el autor de los asesinatos de Juan Antonio Fernández Gutiérrez, subdirector de la Brigada Político-Social, del agente de la Policía Armada Lucio Rodríguez Martín y de la de un coronel de la Guardia Civil.

Por estos hechos fueron condenados a muerte y fusilados poco antes de que acabara la dictadura Xosé Humberto Baena Alonso, José Luis Sánchez Bravo y Ramón García Sanz. Sin embargo, el padre de Iglesias no participó de los delitos como desde la extrema derecha han intentado vincular. De hecho, ya se encontraba en la cárcel cuando estos ocurrieron, por repartir propaganda del 1 de Mayo, Día del Trabajador.