España avanza. Es el lema del 40º Congreso Federal del PSOE que se celebrará en Valencia los próximos días 16 y 17 de Octubre. Es un eslogan verdadero porque es la imagen más fiel y real de nuestro país, España.

Los últimos datos positivos de creación de empleo, de incremento del número de afiliados a la Seguridad Social y de reducción del número de parados, muy por encima de los niveles previos al inicio de la pandemia del Covid, revelan que España avanza en positivo. Revelan que la acción del Gobierno que preside Pedro Sánchez está dando buenos resultados. Y, sobre todo, revelan que la política social y económica aplicada por el PSOE está funcionando y que marca el camino hacia el futuro.

Un futuro en el que los pensionistas y los funcionarios verán incrementado su poder adquisitivo en 2.022 en función del IPC. Un futuro en el que la prioridad es superar la crisis pensando en las empresas, en los autónomos, en los trabajadores, en los pueblos y en el medio rural, en los jóvenes, en las mujeres y en los estudiantes incrementando las becas. Un futuro para que nadie se quede atrás y la recuperación social y económica sea totalmente distinta a las medidas de recortes y ajustes de los Gobiernos del PP de Aznar y Rajoy que tanto y tanto daño hicieron a los ciudadanos de España, especialmente a los más vulnerables.

El Consejo de Ministros continúa su hoja de ruta aprobando medidas económicas y sociales para seguir avanzando. Para conseguir una España que siga creciendo económicamente, más justa, más social, más solidaria y más próspera.

El incremento del Salario Mínimo Interprofesional, el Ingreso Mínimo Vital, la ampliación de los ERTE,s y medidas de apoyo a los autónomos, apoyo financiero a las comunidades autónomas y a los ayuntamientos, a las empresas y a las personas. O la extensión de la banda ancha de internet del PEBA a todo el territorio nacional. Nada que ver con las políticas neoliberalistas de la derecha que solo aspiran al enriquecimiento de unos pocos, muchas veces inmoral y delictivo.

Nuestro país ha superado la pandemia gracias a una gestión ejemplar del Gobierno que ha  permitido cumplir los objetivos de vacunación y de recuperación. Ese es el camino que ha marcado el Gobierno de España con el apoyo de la Unión Europea.

El Boletín Oficial del Estado publica cada día las nuevas medidas de apoyo de los Fondos Europeos dentro del Plan de Recuperación y Resiliencia, otro revulsivo más, una inyección económica fundamental para que España avance.

Frente a esa gestión eficaz y solvente, que tiene como objetivo principal las personas, las empresas, la economía y el conjunto del interés de toda España, la derecha de Vox y el Partido Popular han optado por el extremismo, el frentismo y la crispación. El único recurso que conocen para llegar al poder y recuperar la llave de la caja. Esa caja que han desfalcado cuando han gobernado y que tanto les seduce para pillar los Fondos Europeos.

Producen una sensación nauseabunda las soflamas del pseudolíder Casado en la plaza emblemática de la corrupción del PP, amenazando con acabar con las pensiones, con las medidas sociales, con la subida del Salario Mínimo Interprofesional, con la Sanidad pública, con la Educación pública, con las ayudas a la Dependencia, con la Ley de Memoria Democrática y con todas las acciones de un gobierno de izquierdas para volver a los recortes, a la corrupción y a la privatización de los servicios públicos. Para acabar con el Estado del Bienestar. Para atacar a los más vulnerables desde su posición de élite.

Y para ello se valen de la calumnia, de la mentira y de la manipulación invocando los sentimientos de los ciudadanos de un país, España, que quieren vivir en paz, que quieren trabajar, que quieren sacar adelante a sus familias y que no quieren volver a esa España en blanco y negro del pasado que representan Aznar, Rajoy, el PP y, aunque él no lo sepa, también Casado. Porque, aunque no lo sepa o no quiera saberlo, forma parte de esa España del pasado.

En la plaza de toros de la corrupción, Casado invocaba el pasado “glorioso” de Rajoy, de Aznar, de Rato, de Cascos, de Camps, de Zaplana, de Matas, de Matos, de Bárcenas, de la Kitchen, de la Gürtel, de la Púnica, de las tarjetas black de Bankia, y de tantos y tantos episodios vergonzosos e indecentes de corrupción y conductas mafiosas que los españoles, los de toda España, queremos olvidar.

Podrán seguir gritando, insultando, calumniando, manipulando, robando o ejerciendo sus actividades de banda criminal organizada, como dicen los jueces.

Podrán seguir con su teatro y sus diatribas neofranquistas ridículas, rancias y arcaicas para competir en extremismo de derechas.

El Gobierno de nuestro país, el PSOE, trabajamos en la España que avanza. Trabajamos hacia el futuro y actuamos al servicio de los ciudadanos, de manera honesta, eficaz y solidaria.

Una España que avanza en positivo frente a una derecha neofranquista.

Antidio Fagúndez es diputado del PSOE por Zamora.