El asunto se discutirá en el Pleno del próximo 20 de diciembre. No es probable que salga adelante, ya que Albiol no cuenta con mayoría en el Gobierno municipal, y los grupos en la oposición, PSC, CiU e ICV-EUiA, se oponen.

En La Salut
Según fuentes municipales citadas por El Periódico de Catalunya, una comunidad musulmana del barrio de La Salut pidió en julio pasado abrir un oratorio. El líder de CiU en Badalona, Ferran Falcó, ha considerado que “ese proyecto cumple las condiciones que precisamente García Albiol ponía sobre la mesa cuando estaba en la oposición para resistirse a la apertura de nuevas mezquitas”.

Cumple las exigencias de Albiol
El dirigente de CiU ha recordado que Albiol exigía que los nuevos centros de culto se construyeran “sin ayudas públicas y en locales correctamente acondicionados” y la solicitud de la comunidad musulmana de La Salut cumple con esos dos requisitos, por lo que estima que tiene posibilidades de salir adelante.

El alcalde reivindica su triunfo electoral
García Albiol cree que la construcción del nuevo centro de culto, es un error y que hay que sopesar lo que conviene a la ciudad. El alcalde reivindica que el modelo del PP “fue el que se impuso en las pasadas elecciones municipales” y que hay que respetarlo.

Un discurso populista contra la inmigración
García Albiol apostó en su campaña electoral por un discurso populista a favor de los nacionales y en contra de la inmigración a la que identificó con delincuencia. Lo hizo con el beneplácito de la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, que en septiembre pasado le apoyó una vez más cuando el alcalde tuvo que declarar en los juzgados por una denuncia de SOS Racismo por un presunto delito de xenofobia.

Los folletos contra los rumanos
En abril de 2010, García Albiol, y la propia Sánchez-Camacho distribuyeron por la ciudad unos folletos en los que se relacionaba a la comunidad rumana con la delincuencia.

La reforma de la ley de culto
Desde septiembre pasado, el Govern ha dado el poder a los alcaldes para decidir si destinan suelo en sus planes urbanísticos para usos religiosos, a partir de la reforma de la ley de culto. Algunos ayuntamientos catalanes han dificultado la construcción de centros de culto musulmanes. Es el caso de Salt donde la presión de la xenófoba Plataforma Per Catalunya (PxC), que dirige el ultraderechista consiguió que se suspendiera durante un año la concesión de licencias para construir y abrir este tipo de locales en el polígono de Torremirona, zona reservada por el anterior Govern para nuevos oratorios. También en agosto, el Ayuntamiento de Torroella de Montgrí vetó una mezquita porque el alcalde de CiU alegó que no le gustaba “la apariencia exterior del edificio”.