El alto cargo de la Concejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid Francisco Lobo ha sido destituido, tras su imputadicón en el caso Púnica, este lunes, por el juez García Castellón, que investiga la financiación irregular del PP de Madrid. De hecho, el encargado de anunciar su cese ha sido el vicepresidente y líder de Ciudadanos en Madrid, Ignacio Aguado, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid.

Según el juez, Francisco Lobo aprobó contratos dudosos y recepcionó facturas con conceptos "simulados" y las tramitaba como adjudicaciones menores, durante su etapa en la Consejería de Economía y Hacienda, donde era secretario general técnico, puesto que ocupó en los gobiernos de Esperanza Aguirre, Ignacio González y Cristina Cifuentes. Algunas de esas operaciones habrían permitido al PP financiarse ilegalmente a través de empresas intermedias que realizaban actos relacionados con la comunicación y la publicidad y realizaron donaciones a la fundación Fundescam.

En su auto, el juez explica que Lobo "certificó en el expediente de concesión en el año 2008 de la subvención a Fundescam" (entidad vinculada al PP investigada por financiación irregular], posibilitando "el desvío del dinero público de la misma".

El vínculo de Lobo con Díaz Ayuso

Francisco Lobo era consejero de Avalmadrid en 2011, cuando esa entidad, investigada por el Banco de españa, aprobó un aval por 400.000 euros al padre de la actual presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. El piso familiar se salvó gracias a una donación de su familia a la dirigente popular cuando la sociedad atravesaba dificultades económicas.