“Yo que Pablo cogería con pinzas el apoyo que Dolores le prestará hoy públicamente a su candidatura”. Declaraciones realizadas a ELPLURAL.COM por fuentes de la dirección del PP, que en un alarde de sinceridad, no exenta de fina ironía, nos recuerdan el “mal agüero” que  “ya viene siendo costumbre” en todos los apoyos explícitos de la exsecretaria general del PP y gran perdedora de las primarias de este partido, María Dolores de Cospedal. “No podemos olvidar, y la lista es amplia y por todos conocida, que cada vez que Cospedal cierra filas con alguno de los nuestros, el infortunio, la mala suerte o, simplemente, los jueces, se encargan de desmontar el apoyo que en nombre de Dolores le presta el partido”, añaden, “la nómina de caídos es para echarse a temblar: presidentes de comunidades, ministros, consejeros, candidatos…en fin, yo si fuera Casado no me echaría en sus brazos sabiendo lo que les ha pasado a los que apoyó y luego cayeron a los infiernos”.

Su gran amigo “panameño” Soria

De ahí, que ElPlural.com haya hecho un breve pero demoledor repaso de las consecuencias que tuvieron en su día el apoyo de Cospedal a líderes del PP cuestionados por sus actuaciones, como cuando el 12 de abril de 2016 la entonces secretaria general de los “populares” no dudó un instante en cerrar filas con su íntimo amigo, José Manuel Soria, ministro por aquel entonces de Industria vinculado a los llamados papeles de Panamá, asegurando que nadie en España había hecho un “ejercicio de transparencia” como el realizado por el canario. Tres días después, Soria dimitía y anunciaba su abandono total de la vida política, tras conocerse su participación en empresas familiares radicadas en paraísos fiscales. Cospedal le organizó en Canarias una despedida por todo lo alto. Qué menos.

Su entrañable compañera “cleptómana”

Dos años más tarde. La entonces ministra de Defensa y secretaria general del PP, además de diputada nacional por Toledo y presidenta de los conservadores castellano-manchegos, confirmaba su apoyo a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes. Era el 17 de abril de 2018, fecha en la que Cospedal le parecía “una carta muy bien fundamentada y muy explicativa de todo lo que ha ocurrido”, decía respecto a la conocida polémica del máster nunca realizado, para añadir con contundencia: “Y sí, la sigo apoyando”. El 25 del mismo mes, Cifuentes presentaba su dimisión horas después de que un vídeo recogiera el momento en el que era retenida en una gran superficie por robar dos cremas.

Suma y sigue: Su amigo Nacho

Sin dejar la Comunidad de Madrid, tal vez, la región donde el PP tiene abiertos más casos de corrupción, Cospedal se deshacía en elogios hacía Ignacio González, presidente en septiembre de 2012 tras la dimisión de Esperanza Aguirre. “Tiene el apoyo absoluto y concreto del PP”, dijo en un desayuno organizado por el periódico La Razón. Cinco años más tarde, el 22 de abril de 2017, el juez Eloy Velasco ordenaba el ingreso en prisión del expresidente de la Comunidad de Madrid, Nacho González, como el gran organizador de la trama corrupta Lezo, acusándole de delitos de integración en organización criminal, blanqueo, falsificación, prevaricación, malversación y fraude. Ahí queda la cosa.

De Madrid a Murcia…

Febrero de 2017: La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, pedía que se respetara la presunción de inocencia del presidente de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, y subrayaba que su aparición en el sumario de la trama Púnica es por “un contrato que nunca se celebró”. Abril de 2017: Tras 45 días de cerco judicial, y tras constatar que Ciudadanos iba a apoyar una moción de censura, Pedro Antonio Sánchez anuncia su dimisión rodeado de sus consejeros.

…Pasando por Valencia y Camps…

Viaje al pasado. El 16 de mayo de 2009, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, defendía al entonces presidente de la Comunidad de Valencia, Francisco Camps, citado a declarar en relación con el “caso Gürtel”, asegurando que es una buena noticia porque “así se defenderá personalmente de todas las acusaciones e insidias que se están vertiendo contra él”. Dos años más tarde, Camps dimitía de la presidencia de la Generalitat para que “mi sacrificio permita a Rajoy ser el próximo presidente del Gobierno”. Eso es cierto, en 2011 M. Rajoy ganó las elecciones generales.

...Con parada en Andalucía y CyL

Si a todo esto le añadimos que el candidato de Cospedal para presidir el PP en Andalucía era el sevillano José Luis Sanz, y que Rajoy la desautorizó nominando al “sorayo” y entonces secretario de Estado de Servicios Sociales, Juan Manuel Bonilla, o que el apoyo de Cospedal al alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, para suceder a Juan Vicente Herrera en la presidencia del partido en Castilla y León no parece funcionar ya que todas las encuestas le dan como perdedor en el hasta ahora bastión del PP en las elecciones autonómicas de 2019, entonces, ¿quién quiere el apoyo explícito de María Dolores de Cospedal? “Yo que Pablo me lo pensaría”, finalizan ironizando nuestras fuentes.