Lo ocurrido en Coripe (Sevilla) este domingo con el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, qon la quema del muñeco que representaba a su persona durante la Fiesta de la Quema del Judas, no es la primera vez que ocurre. 

En Twitter, algunos usuarios han señalado a este municipio, precisamente, como ese que "cada domingo de resurreción ofende gravemente a un colectivo". 

Hace un año el alcalde socialista de la localidad, Antonio Pérez, explicaba de esta polémica manera cómo durante la fiesta del municipio "se mata un mal" mediante un muñeco que representa una figura conocida. Políticos, banqueros y otros personajes han tenido la misma suerte que este domingo el expresidente de Cataluña.