El Gobierno de España no aceptan ultimátums y mantiene su vía del diálogo". Así de clara ha sido este martes la ministra portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, respondiendo a las amenazas de Quim Torra.

Sólo unas horas antes, el president de la Generalitat lanzaba un mensaje a Pedro Sánchez: o convocaba un referéndum en un mes, antes de que acabase noviembre, o pediría a los partidos independentistas que retirasen su apoyo al Gobierno para no poder legislar en el Congreso de los Diputados.

Torra ha asegurado que, de no cumplirse sus exigencias, Sánchez "no podrá garantizar ningún tipo de estabilidad".

Que no espere un mes

Quim Torra, president de la Generalitat, junto a Roger Torrent, president del Parlament. EP

Pero el Gobierno ya ha respondido a Torra. "El presidente de la Generalitat no tiene que esperar al mes de noviembre para conocer nuestra respuesta: la respuesta es autogobierno y no independencia", ha dicho Celaá porque "el Gobierno de España no acepta ultimátums" vengan de quién vengan.

Y Celaá ha vuelto a abogar por el diálogo como única salida de este conflicto avisando de que no hay porque ir hacia un 155 permanente ni hacia el precipicio, pues se puede encontrar un punto medio de convivencia. "El Gobierno catatán debe respetar la convivencia y respetar todos los derechos, de nacionalistas y no nacionalistas. Hemos de recordar a la Generalitat una vez más que una sociedad dividida es una sociedad sin futuro. La obligación de los poderes públicos es ayudar a cerrar las heridas abiertas".

"El president Torra sabe cuál es la posición del Gobierno. La misma que han manifestado los catalanes y catalanas cuando han sido llamados a las urnas. No quieren la independencia, reclaman convivencia", ha insistido.

Torra “se equivoca” con los CDR

La portavoz ha insistido en que el Gobierno quiere “tender puentes” y avisa de que “el independentismo debe no volver a caminos que conducen a la frustración”.

Por ello considera que Torra se ha vuelto a equivocar al alentar a los CDR a actuar con violencia y actos callejeros en la celebración del primer aniversario del 1-O.

"En Cataluña sobran gestos y falta responsabilidad. Lo que está en juego es la convivencia. El señor Torra debe abrir un diálogo entre nacionalistas y no nacionalistas. La propuesta que une es la convivencia, no la independencia", ha dicho.