El muro exterior de la vivienda familiar de la ministra de Educación, Isabel Celaá, en la localidad vizcaína de Getxo ha aparecido este domingo con pintadas en las que se exigía su dimisión.

Según han informado fuentes del Departamento vasco de Seguridad, los servicios municipales ya han procedido a retirar los restos de pintura.

La ministra de Educación, Isabel Celaá, se desplazó este viernes a Bilbao, porque, según explicaron fuentes de su equipo, sufrió una indisposición y acudió para una consulta con su médico de Atención Primaria habitual. Su viaje fue utilizado por la derecha mediática para atacar a Celaá, de la que se dijo huía de Madrid tras decretarse el Estado de Alarma.

El PSE-EE condena estos "comportamientos fascistas"

El PSE-EE no ha tardado en hacer pública su condena al "acoso" a la ministra y ha mostrado su rechazo a estos "comportamientos fascistas". En este sentido ha subrayado que "las reglas de la democracia", por las que el PSE-EE ha luchado durante décadas en Euskadi, "no admiten comportamientos de este tipo, que sólo buscan la crispación y son una cara más de la intolerancia" que ha padecido y que no ha podido "doblegarle".

"Queremos trasladar a Isabel Celaá nuestro cariño y respaldo y advertir a los intolerantes de que no van a conseguir el objetivo último que persiguen. Vamos a seguir firmes en la defensa de las libertades y de las políticas progresistas", ha asegurado el secretario de Organización de los socialistas vascos, Miguel Ángel Morales.

Y ha advertido: "Están muy equivocados los que, con comportamientos fascistas de este tipo", que condenan "firmemente", pretenden amedrentar a los miembros del partido "y, muy especialmente a una compañera de trayectoria intachable y servicio público ejemplar".