Este miércoles se ha producido el primer encuentro cara a cara entre Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal desde que el dirigente de la ultraderecha rompiera todos los gobiernos regionales que hasta ahora mantenía el PP y Vox en coalición a cuenta del reparto de los menores no acompañados. Una reunión a vista de todos los españoles que no solo no ha evidenciado un acercamiento sino una brecha mayor, especialmente por el tono durísimo que ha utilizado el presidente de Vox contra el popular. 

Abascal embiste a Feijóo tras romper

Si bien Abascal ha comenzado su intervención en el Congreso, en el marco de la comparecencia de Sánchez para presentar su plan de regeneración democrática, cargando contra el jefe del Ejecutivo con una estrategia muy similar a la del presidente popular, el de Vox ha dirigido buena parte de sus embistes al capitán del barco situado en Génova. La estratagema ha pasado de copiar las acusaciones de corrupción que lanza el PP por el supuesto caso de Begoña Gómez o el hermano de Sánchez, a atacar con todo a los populares.

Así, el líder ha iniciado un contraataque contra el PP, al que ha tildado de "una falsa oposición" y a la que ha acusado de "fingir" estar en contra de las políticas socialistas al tiempo que han seguido ofreciendo -y cerrando- pactos con ellos al puro estilo del bipartidismo. Abascal ha marcado distancia con el que hasta ahora ha sido su socio principal tanto dentro de la Cámara baja como en las sedes autonómicas -y todavía en los ayuntamientos- y les ha querido presentar como aliados de Ferraz.

Tanto al PP como al PSOE les ha acusado de tener "comprados a todos los medios de comunicación". De hecho, ha sostenido que la pretensión del Gobierno es "comprar líneas editoriales" e iniciar "una persecución ideológica" contra la libertad de prensa con su proyecto de reforma de la Ley de Publicidad Institucional que ha anunciado la coalición. A su juicio, lo que busca Sánchez es el control de la opinión pública con su "discurso abiertamente totalitario".

De esta suerte de boicot al pensamiento y la expresión libre ha acusado también a los populares como parte del problema. Muchos minutos de su tiempo ha dedicado Abascal a lanzar dardos a Feijóo, que ha pasado de ser su socio a su enemigo en solo una semana. "Señor Feijóo, no es ético ni es estético pactar con esto. No es ético ni es estético llegar a acuerdos con el Partido Socialista", ha afirmando, utilizando una expresión antes usada por el dirigente popular desde el mismo estrado.

"Ante lo que estamos viviendo, que entiendo que le molesta y le preocupa, escuchando su intervención, no se entiende que se repartan todo con Pedro Sánchez, que se repartan ustedes el Consejo General del Poder Judicial, que se repartan el Tribunal Constitucional y que hayan nombrado a Conde-Pumpido, teniendo en cuenta lo que ahora estamos padeciendo. Que se repartan el Tribunal de Cuentas, Radio Televisión Española, la Junta Electoral y las comisiones parlamentarias, tanto en el Congreso como en el Senado, además de los sillones en Bruselas", ha dicho.

La pinza Vox-PSOE y los "plumillas" del PP

De esta forma, ha criticado los acuerdos que ha alcanzado en los últimos meses el PP con el PSOE, pese a criticar constantemente a los socialistas. Lo que más les duele, sin duda, es el reparto de los menores inmigrantes, pese a que es en cumplimiento de la ley. Es por ello que le ha afeado que desde Génova insistan en hablar de una "pinza" o alianza entre los ultraderechistas con Sánchez, como llevan afirmando meses, incluso mandando a los medios simpatizantes a difundir esta idea.

"Y lo que no se entiende es que después de esto, señor Feijóo, se atrevan ustedes a hablar de la pinza de Vox y del Partido Socialista. Y de que Vox es el mejor aliado de Sánchez. Que lo digan ustedes y que también encarguen a todos sus plumillas a que vayan a decirlo. Y luego vienen aquí y lo pactan todo con Sánchez en esta Cámara y en Bruselas", ha reiterado Abascal, poniendo el foco en que, aunque el PP denuncie el peligro de la falta de libertad de prensa, desde la dirección popular hacen precisamente lo que critican. 

Y Abascal ha insistido. "Todos ustedes, unos y otros, están discutiendo sobre calidad democrática, y lo hacen entre el gobierno corrupto hasta la médula y la falsa oposición, pero hacen como que discuten porque se finge discutir sobre calidad democrática cuando se han repartido los jueces como cromos y además se han ido a hacerlo a Bruselas y probablemente allí se lo han impuesto esa señora que no se sabe de quién es aliada, si del Partido Popular o del PSOE", ha dicho sobre Ursula Von der Leyen.

Llamativo ha sido un punto en el que ha incidido el dirigente ultraderechista en relación con el reparto de menores migrantes. Y es que el presidente de Vox ha pedido una suerte de consulta pública para preguntar si los vecinos de los barrios que cuentan con centros de acogida de inmigrantes están a favor de que estos estén allí localizados. Un extremo que ha sido aprovechado por los independentistas. Concretamente por Gabriel Rufián, que ha ironizado con que "lo mejor ha sido verle defender referéndum, pidiendo que la gente vote". También sobre La Roja​​​​​​​.

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