En febrero de 2008, el consejero delegado de Mediaset España, Paolo Vasile, tuvo que aclarar que el afamado programa de televisión ‘Aquí Hay Tomate’ no había sido retirado de la parrilla de Telecinco por las presiones de Juan Carlos I. “El Rey no acabó con ‘El Tomate’ pero sí llamó a Berlusconi (fundador y presidente del grupo de comunicación) para quejarse”. Un año más tarde, Vasile añadía: “El Gobierno no llama para presionar, es mucho más agobiante la Casa Real”.

Declaraciones que contrastan con la repercusión mediática que esta semana ha tenido la noticia publicada por ‘OK Diario’. “El CNI compró el silencio de Bárbara Rey, amante de Juan Carlos I, con fondos reservados en Luxemburgo”, tituló el periódico que dirige Eduardo Inda. Una información de la que se hicieron eco los principales programas de sociedad que acaparan buena parte de la parrilla de las televisiones más vistas en España.

Sin ir más lejos, este viernes ‘Sálvame Deluxe’ dedicaba buena parte de su programa a airear la relación que el monarca supuestamente mantuvo con la ‘vedette’. Se constataba así que en apenas ocho años, la prensa del corazón ha pasado de no hablar del rey emérito a tratar sin pudor y en ‘prime time’ sus presuntos ‘affaires’.

El fin del “pacto de silencio”
“A la hora de informar sobre la Casa Real, ya no existe la censura que existía antes”, explica a ELPLURAL.COM Pilar Eyre. La periodista y escritora denuncia que “en la transición, tras el 23-F, se juntaron los cuatro directores de los periódicos más importantes de Madrid e hicieron un pacto entre caballeros, de ‘manga ancha al Rey’, de no inmiscuirse en sus temas personales”. Un pacto de silencio que se habría extendió al resto de la prensa pero que según Eyre ya se ha levantado: “Ese pacto ya ha prescrito. A la hora de informar sobre la Casa Real ya no existe la censura que existía antes”. 

“El Rey ya es emérito para todo. Está jubilado para todo. Del poder y también de su capacidad de influencia”, sostiene la escritora. Opinión similar ofrece a este periódico Iñaki Anasagasti. El ex senador del PNV y autor del libro ‘Una monarquía protegida por la censura’ (editorial Akal) asegura que “el pacto de silencio existió, pero se rompió con el escándalo de Botsuana en 2006 y su ‘lo siento mucho, no volverá a ocurrir’”.

En cualquier caso, Anasagasti aclara que “de todo lo que se está hablando ahora ya se hablaba en Madrid, lo que ocurre es que no quedaba recogido por ningún medio de comunicación”.

En su opinión, “seguirán saliendo escándalos” en los próximos días. “Cuando se abre la veda, siempre hay alguien que cuenta la historia”, sostiene Anasagasti tras insistir en “la vida  de derroche, de amigotes, de amantes…” que supuestamente ha mantenido el rey Juan Carlos I: “No ha sido una persona sensible, no ha tenido una fundación, un proyecto social… Sólo se ha preocupado de él: de sus viajes, de sus restaurants, de sus amantes y de sus cacerías.”