Durante su asistencia a los actos de celebración de los 100 años de la  revista Vogue Victoria Beckham, la  ahora  diseñadora  de  moda y antes cantante se quejó de que le silenciaban  el  micrófono  durante  las  actuaciones  de  su  grupo  las Spice Girls y dejaban que las otras cuatro integrantes hicieran todo el trabajo. Hablo de que, como sus compañeras preferían vestir gratis, se quedaban con las "porquerías" y ella podía deisponer de todo el presupuesto de la banda para comprarse trajes de Gucci.

El  manager de las chicas ya había relatado que Victoria nunca estuvo  a gusto en  el  grupo musical, a pesar de que juntas vendieron 30 millones de copias de su primer disco. Cuando dejó de cantar se dedicó a la moda y ha logrado amasar una fortuna mayor que la de su marido, que asciende a unos 46 millones de euros.