Menend es un cantante y productor madrileño que acaba de lanzar All Back Deluxe, su quinto disco. En este nuevo álbum combina diversos géneros como el R&B, rap y pop urbano. A lo largo de una conversación con ElPlural.com, Menend reflexiona sobre su proyecto y su persona.

Pregunta: Empezamos un poco fuerte y directos. ¿Quién es realmente Javier? ¿Menend y él son la misma persona?

Respuesta: Creo que Menend, al final, siempre es un poco mi fantasía sobre quién quiero ser. Es cierto que a medida que avanzas con el personaje te lo vas creyendo más y al final acabas siendo bastante así. Además, como he dedicado ya mucho tiempo de mi vida a madurar mi música, creo que ambas facetas ya van bastante de la mano.

P: ¿De dónde surge Menend? ¿En qué momento sale a la luz?

R: El nombre viene del apellido de mi madre, Menéndez. Busqué muchos nombres, pero al final volví a ese. Menend surge cuando era chaval y empecé a descubrir los géneros que más me gustaban, como el R&B y música internacional, y comencé a ser más independiente como consumidor de música. Enseguida empecé a hacer mis propios experimentos, y cuando descubrí a artistas como The Weeknd o Chris Brown, supe que quería ir por ese camino. De hecho, siempre me gustó que Menend tuviera la “N” de The Weeknd, así que creo que eso también influyó en los inicios.

P: Estudiaste en Estados Unidos y fue entonces cuando comenzaste a desarrollarte como artista. De hecho, tenías un contrato, ¿por qué decidiste volver a España?

R: Estuve en Los Ángeles cuando estaba terminando mis estudios y acabé firmando con un grupo de gente allí. Fue una experiencia espectacular: muchas anécdotas, enseñanzas y aprendizajes. Pero ellos tenían una mentalidad muy industrial y enseguida quisieron convertirme en un producto, en algo que encajara en lo que ellos querían. Yo, en ese sentido, soy bastante cabezota, me gusta ser artista de verdad, crear mi obra sin centrarme en el éxito. Cuando vi que todo se desvirtuaba demasiado, decidí que prefería ir más despacio y trabajar desde casa antes que quedarme allí y acabar convertido en algo que no fuera ni Menend ni Javier, ni nada auténtico.

P: ¿Crees que esa experiencia ha influido en la que es ahora tu carrera artística?

R: Sí, 100%. La experiencia en Los Ángeles, sobre todo al principio, me ayudó mucho, llegar con esa mentalidad fresca me permitió introducirme en la industria rápidamente, conocer a mucha gente y trabajar en muchos proyectos. Todo lo que aprendí allí me dio una ventaja para, desde joven, poder hacer muchas cosas aquí.  Más adelante, reconozco que fui perdiendo un poco esa mentalidad en los años previos, cuando intenté adaptarme más. Ahora, en cambio, siento que estoy recuperando toda la fortaleza y autenticidad que traía desde aquel entonces.

P: ABR son las siglas de All Back Records, que es la primera canción de tu nuevo álbum, y también son las siglas de tu propia productora, que creaste con tu madre. ¿Cómo surge eso de crear una productora con ella?

R: Pues eso, la verdad es que son cosas de gente más adulta que yo en ese momento. Cuando empecé a hacer mis primeras demos y proyectos en GarageBand del iPhone, enseguida hubo gente externa, del mundillo de la música que empezó a darme validación. Tuvimos alguna reunión con una major en la que, de repente, mi madre veía que su niño de 16 años, que nunca había hecho nada en la musica, recibía consejos de gente que trabajaba con nombres muy grandes: “Cómprale un ordenador, que se lo tome en serio, vamos a ponerlo con este productor”, y tal. A ella eso le hizo apoyarme mucho, y en ese momento dijo: “Para poder tener todos los derechos de autor y todo bien formalizado, vamos a hacer una compañía”. Así hicimos All Back Records, y por suerte, toda la música que he sacado hasta ahora ha sido editada o coeditada con All Back Records.

 

P: Junto a eso eres productor también, ¿cómo compaginas producir música para otros artistas con llevar tu propio proyecto?

R: La verdad es que creo que necesitas estar en un nivel de éxito y de demanda muy grande para que no se puedan hacer las dos cosas. Yo me tomo muy en serio ambas carreras, trabajo mucho en mi proyecto, pero también quiero tener una carrera larga y sólida como productor, no solo de mi propia música, que la produzco toda yo, sino de otros artistas, hacer álbumes para ellos y colaborar con quienes confíen en mí. Es algo que me apasiona. Para mí no es un problema compaginarlo. Este año, sobre todo, he estado más centrado en mi proyecto, pero por ejemplo he producido el álbum de Sofía Amores que acaba de salir. Me gustaría poder compaginarlo siempre, independientemente del éxito que tenga, siendo como un apoyo para otros artistas, produciendo sus álbumes y también los míos.

P: Ahora centrándonos en tu nuevo álbum, la canción Ser bueno repite mucho "qué cruel es a veces ser bueno",  y parece girar en torno a esa idea. ¿A qué te refieres exactamente con ella? ¿Está relacionado con eso de “de tan bueno, tonto”?

R: Sí, en cierto modo. Es una canción que llevaba tiempo queriendo escribir y estoy muy contento de cómo ha quedado. Quería transmitir un mensaje universal que aplique a todo el mundo.. Al final, todos tenemos ciertos prejuicios y comportamientos hacia los demás. El mensaje es que nadie es 100% bueno ni 100% malo: ser bueno se refleja en las acciones que hacemos a lo largo de la vida y del día a día. Me parece que lo más valiente que se puede hacer es ser bueno, porque implica sacrificio; a veces eres bueno y no lo eres contigo mismo. Por eso, en esas situaciones en las que ser bueno es difícil o cruel, seguir siéndolo me parece lo más valiente. Quería hacer esa canción para todo el mundo y creo que ha quedado bastante como quería.

P: Hablando de escribir, ¿cómo es tu proceso de creación de una canción? ¿Empiezas por la letra, la melodía, una emoción concreta?

R: La verdad es que ha variado mucho. Depende del tipo de canción y de lo que busques, hay muchos procesos diferentes. Trabajo desde casa, en mi home studio, y la mayoría de mis canciones se hacen en una sola sentada, hago la producción, la letra y lo grabo; luego regrabo y ajusto cosas, pero eso representa al menos el 90% de lo que va a salir. Muchas veces parto de la producción y la melodía y luego escribo a partir de ahí. Para este álbum, sin embargo, lo hice diferente, le di mucha importancia a la letra. Por eso hay mucho rap; escribo primero la lírica sobre la melodía y luego encaja como rap. Para este proyecto, tiré mucho de la sustancia lírica y después maduré la producción, los estribillos y los arreglos, primero la letra y luego el sonido.

P: El 21 de noviembre hiciste un concierto en Madrid y el 23 de enero tienes otro en Barcelona. ¿Habrá más fechas?

R: Empecé el 1 de noviembre en Oviedo y el 21 de noviembre en Madrid. La gira es de tres fechas y fue un experimento para mí, porque la organicé yo mismo, para ver cómo manejar las salas, formalizar una banda y dar vida al concepto de Menend en directo. Hasta ahora he estado mucho en el estudio, así que mi intención es empezar a vivir más en el escenario, reunir público y poder girar a lo largo del año, participar en festivales y consolidar la experiencia en directo. Queda Barcelona, y aunque estoy descubriendo lo dura que es la venta de entradas, estoy muy agradecido por la gente que va a los conciertos. Me lo estoy gozando muchísimo y tengo muchas ganas de hacer Barcelona el 23 de enero y seguir buscando más oportunidades.

P: La música es un entorno muy competitivo, y como ya has dicho, vender entradas también es un proceso complicado. Actualmente, ¿puedes vivir exclusivamente de la música? ¿Te has planteado dejarla en algún momento?

R: Sí, por ahora he podido vivir de la música desde hace bastante tiempo, aunque más por mi trabajo como autor y productor que por mi proyecto propio, que me ha dado muchas alegrías pero también más inestabilidad. Es un negocio largo y complicado, como una pequeña empresa que tiene que conseguir clientes, ya sean fans o artistas con los que producir. Obviamente, en momentos de bajón también se echa de menos la estabilidad que otros trabajos pueden ofrecer. Pero creo que, cuando es algo tan vocacional, merece la pena tener paciencia, sobre todo viendo todo lo que he construido hasta ahora. Sería una pena tirar la toalla , así que creo que este es el mejor momento para poner toda la carne en el asador. Claro que surgen dudas, como a cualquier joven hagamos lo que hagamos.

P: Y respecto a toda la incertidumbre, sobre todo en tu proyecto personal más que en el de productor, ¿cómo gestionas eso de no tener esa estabilidad?

R: Yo al final  estoy bastante bien alineado, así que no me cuesta mucho. Siempre que he tenido un momento de paranoia o de frustración, más allá de que lo muestro mucho en las canciones, la música ha sido un lugar de escape para todas estas emociones. A nivel personal, soy capaz de callar los fantasmas bastante fácil. Cuando me siento por debajo de donde querría estar, también imagino todas las cosas que he conseguido hacer y todo el camino recorrido. Se me da bastante bien ponerlo en perspectiva y no sufro tantísimo, aunque sí que hay frustraciones. Sobre todo este año, por el nivel de entrega que he mostrado ya que no solo he producido y sacado mucha música, sino que también edito y produzco mis videoclips, he hecho como 10 vídeos, 15 piezas audiovisuales probablemente. Con algún amigo que me ayuda en cámara, actuación, estilismo… ver que los frutos a lo mejor no llegan o no son como quieres es complicado. Pero más allá de eso, disfruto muchísimo de todo lo que hago, y por eso puedo callar las frustraciones, porque al día siguiente me apetece lanzarme al próximo proyecto que tengo.

P: ¿Te reconoces en tus canciones antiguas o sientes distancia con tus otras etapas?

R: Me reconozco bastante en todas, porque al final, al ser yo el productor y autor de las canciones, sigue siendo mi estilo como autor, lo que sé hacer y lo que me sale de forma natural. Sí que hay etapas que siento más alejadas de mi identidad, porque estaba haciendo experimentos para posicionarme en ciertos mercados o siguiendo modas que creía que podían darme éxito. Ahora recuerdo esos momentos con un poco de amargura, sabiendo que entonces buscaba funcionar y adaptarme con bastante nerviosismo. En cambio, me identifico más con mis primeros proyectos, como Antihéroe o Walkman, y sobre todo con All Back y todo lo que estoy preparando ahora.

P: ¿Tienes algún proyecto o sueño que no hayas logrado aún?

R: He hecho ya muchas cosas; podría decir que casi todo lo que se puede hacer siendo independiente y con presupuestos limitados. Pero me gustaría actuar más, por ejemplo. Ya he hecho algunas cosas de actuación, he salido en un par de cortos y participé en otro proyecto anteriormente. También me gustaría hacer algún álbum colaborativo con algún artista del género con el que tenga buena sinergia, como Churro, o algo al estilo de lo que se hace con Drake. Ese tipo de energía me parece genial y se hace muy poco aquí; hay algunas colaboraciones como Recycle con Natos y Waor, pero poco más.

Al final, mi mayor sueño es poder seguir haciendo lo que hago durante mucho más tiempo, tener una carrera larga y que, a medida que pase el tiempo, las cosas sigan saliendo cada vez mejor.

P: Aparte de los sueños que no hayas logrado aún, centrándonos en 2026, que ya está al caer, ¿qué deseos te gustaría cumplir a corto plazo?

R: Ahora mismo estoy tratando de reformular mi equipo. 2025 ha sido un año sin manager, sin editorial, sin booking, sin nada, en el que he podido desarrollar mi identidad y sentirme bien en mi propia piel. Mi intención para 2026 es buscar más aliados, gente que pueda ayudar a que todo sea más grande y mejor cada vez. Más allá de eso, tengo más lanzamientos que iré sacando mientras formalizo todo esto. También hay otro álbum bastante avanzado que estoy terminando y tengo muchas ganas de empezar a sacar. De hecho, ese nuevo álbum es previo a Allback, que estaba generando el camino para este proyecto que viene.

P: ¿Ese álbum tiene fecha de lanzamiento?

R: De momento, no tiene fecha de lanzamiento.

 

Síguenos en Google Discover y no te pierdas las noticias, vídeos y artículos más interesantes

Síguenos en Google Discover