La alfombra roja, convertida en el escenario donde la moda y el cine se encuentran, ofreció una pasarela de glamour, sofisticación y algunas sorpresas inesperadas. Las estrellas más importantes de la industria desfilaron con looks que marcaron la pauta para el año, fusionando la elegancia clásica con audaces apuestas contemporáneas. Desde vestidos de alta costura hasta diseños minimalistas con toques vanguardistas, la noche dejó claro que la moda sigue siendo una de las grandes protagonistas de la ceremonia.
La nostalgia por la elegancia de décadas pasadas se hizo sentir con fuerza en la alfombra roja de este año. El esmoquin negro con corte impecable volvió a reinar entre los hombres, mientras que muchas de las actrices apostaron por siluetas minimalistas, líneas depuradas y tonos neutros.
Entre los primeros en llegar estuvo Adrien Brody, que se convirtió en uno de los más esperados de la noche tras su nominación y posterior victoria. El actor apostó por un esmoquin de terciopelo negro firmado por Tom Ford, con detalles satinados y un aire nostálgico que evocaba la época dorada de Hollywood.
Adrien Brody en la alfombra roja de los Oscar. EP.
Zoe Saldaña, que se alzó con su primer Óscar por su papel en Emilia Pérez, deslumbró luciendo un diseño hecho a medida de Saint Laurent con un escote palabra de honor forrado con una red metalizada y falda de doble globo en un color borgoña satinado.
Zoe Saldaña en los premios Óscar. EP.
Mikey Madison, otra de las premiadas de la noche por su papel en Anora, apostó también por un palabra de honor, en este caso rosa, con una lazada frontal y cola desde la espalda de Christian Dior.
Mickey Madison en la alfombra roja. EP.
Si hay alguien que no sule fallar en las alfombras rojas es Penélope Cruz. Con un modelo Chanel blanco impoluto con capa desde los hombros, Penélope llegaba a la alfombra como una novia. Una silueta encorsetada con botones joya en la parte fontal.
Penélope Cruz en los Óscar 2025. EP.
Ariana Grande sorprendió con uno de los looks más comentados de la noche abrazando una estética madura y sofisticada. La cantante y actriz, que acudió nominada por su papel en Wicked, deslumbró con un vestido Schiaparelli. Un vestido de color rosa ballet de corpiño y peplum estructurado con una falda plisada de tul con destellos brillantes. Un estilismo acorde con su nueva estética al más puro estilo Glinda.
Ariana Grande luciendo un Schiaparelli en los Óscar. EP.
Su compañera de casting Cynthia Erivo, también nominada por su papel de Elphaba en Wicked, apostó por un Louis Vuitton. Un impresionante vestido de terciopelo verde botella de cuello de solapa elevada y falda de gala. Erivo completó el look con una manicura XL adornada con joyas.
Cynthia Erivo en la alfombra roja. Getty images.
Timothée Chalamet vestido de Givenchy. EP.
Selena Gómez en los premios Óscar 2025. EP.
Si la alfombra roja de los Óscar es siempre una declaración de estilo, este año más que un escaparate de belleza, se ha consolidado como un espacio donde el arte y la creatividad se encuentran para celebrar una nueva forma de entender el mundo de la moda. La noche no solo celebró el talento cinematográfico, sino también una visión más consciente y renovada de lo que significa brillar en la industria.