El chef Dabiz Muñoz ha decidido subir en un 46% el precio del menú de DiverXo, el nuevo año, de 250 a 360 euros, lo que le convertirá en el restaurante más caro de España. Algunos cocineros en Galicia han visto con buenos ojos la medida y ya estudian también subidas en sus platos más selectos, que podrían alcanzar los 200 euros. 

Dabiz Muñoz ha justificado la importante subida con la mejora laboral de sus trabajadores, que, según ha asegurado, quiere que sean "más óptimas". Su anuncio de la subida de precios llega después de ser elegido el mejor cocinero del mundo en The Best Chef Awards 2021, además de acumular tres estrellas Michelin y tres soles Repsol.  Sus colegas al norte del país emplean parecidos argumentos al admitir que también valoran encarecer sus platos con la llegada del nuevo año debido a la importante inversión en capital humano, innovación, producto, además del aumento del precio de la electricidad en restaurantes de alto standing. 

"Todo está carísimo"

Javi Olleros, chef de Culler de Pau, en O Grove (Pontevedra), estrella Michelín en 2020, ha explicado, en declaraciones recogidas por La Voz de Galicia, que "somos de los sectores más temerosos a la hora de subir los precios, pero respondemos ante una realidad y es que todo está carísimo. La alta cocina tipo Diverxo es un formato muy complicado de mantener. Pero los restaurantes de la carta del día también lo padecen, aunque de otra forma". 

Olleros menciona las razones por las que, según defiende, es necesaria la subida de precios: el alquiler del local, mantener salarios dignos a los muchos trabajadores que están en nómina, afrontar la subida de precios de la carne y, sobre todo, del pescado y del marisco, y soportar la factura de la luz. 

"Lo contrario es inasumible"

El chef Pepe Solla, de Casa Solla, en Poio (Pontevedra), también revisará sus precios una vez termine el año y "si la cosa sigue así tenemos que tomar decisiones", principalmente motivadas, según explica, por la subida de la luz, aunque éste no es el único motivo. 

Lucía Freitas, de A Tafona, en Santiago, también ha admitido que está "valorando que haya un incremento en los precios porque todo está costando más y hay que mantener el negocio". Y lo mismo Caco Agrasar, de As Garzas, en Malpica (A Coruña): "Vamos a tener que subir los precios aunque no queramos. Todo se ha encarecido y lo contrario es inasumible".