Todo lo que está sucediendo en los últimos días en España está basado en una gran mentira del PP. Las manifestaciones con banderas anticonstitucionales, las barbaridades que dicen, la violencia en las calles y los ataques en redes a los socialistas no son por la amnistía, son por el enfado de la derecha que no ha podido gobernar tras el 23J. Al PP la amnistía le importa poco, a Feijóo no le importa absolutamente nada, es solo la excusa. ¿La excusa para qué? La excusa para evitar otros cuatro años de gobierno progresista. Por eso solo quiere que haya nuevas elecciones.

El PP sigue empeñado en deslegitimar todos los gobiernos que no están en su poder. Siguen empeñados en que solo pueden gobernar ellos. Sr. Feijóo, ¿por qué no respeta nuestra democracia y nuestra Constitución? ¿En qué parte de la Constitución ha leído usted que siempre el presidente del gobierno es el que ha ganado las elecciones como dijo el domingo en el acto convocado por el PP? Ayuso perdió las elecciones y gobernó; Moreno Bonilla perdió las elecciones y gobernó, Guardiola perdió las elecciones y gobierna. ¡No más manipulación!

¿Y por qué el PP teme otros cuatro años más de gobierno de Pedro Sánchez? En primer lugar, porque Feijóo desaparecería de la escena política, su partido político, el PP, lo mandaría con Casado. En segundo lugar, porque el PP se destrozaría como organización política entre la ambición de Ayuso y la falsa moderación de Moreno Bonilla, no sabemos quién ganaría, pero sí que habría una guerra cainita. En tercer lugar, los poderes fácticos de la derecha no están dispuestos a más medidas progresistas, no quieren pagar más impuestos ni quieren aumentar los salarios a los trabajadores ni están dispuestos a reducir la jornada laboral. Por eso están dispuestos a destrozarlo todo, incluso poniendo en riesgo la convivencia en nuestro país.

Hagamos una reflexión. ¿Qué hubiese ocurrido en España si la pandemia nos hubiese pillado con un gobierno del PP? Pues habría niveles altos de paro, la economía estaría hundida y cientos de miles familias pasarían dificultades e incluso hambre. Y lo argumento. No habrían llegado miles de millones de fondos europeos; no se habría protegido a millones de trabajadores y de autónomos con ERTE y ayudas en los momentos más difíciles, con lo que muchos de ellos estarían en paro con su empresa cerrada; no se habría aprobado una reforma laboral y mejorado los contratos; no se habría subido el salario mínimo y los salarios serían indecentes; los pensionistas no llegarían a fin de mes. Podríamos seguir un buen rato con ejemplos rotundos para mostrar lo que algunos prefieren no ver.

Entonces, ¿es mejor para España y para los españoles un gobierno que cree más empleo que nunca con una economía que es el motor de Europa o es mejor un Abascal de vicepresidente para que haya salarios más bajos y menos derechos para los trabajadores? ¿Es mejor fortalecer el Estado del Bienestar con más recursos o es mejor que Feijóo gobierne con la ultraderecha recortando sanidad, educación, becas, dependencia o pensiones? ¿Es mejor aumentar derechos y libertades o es mejor que la suma PP-Vox los recorte?

¡Vale, vale! ¿Pero qué pasa con la amnistía? ¿Se va a romper nuestro país? España solo se rompe cuando gobierna el PP porque favorece siempre que los ricos sean más ricos y se olvida siempre de los que más lo necesitan. Pero el PP además siempre que gobierna tensiona los territorios. Del Plan Ibarretxe ya casi nadie se acuerda, pero yo sí, porque estaba como diputado en el Congreso. Con Aznar como presidente se gestó un problema de alto voltaje, el entonces lehendakari planteó una propuesta de consultar a los ciudadanos vascos sobre su futuro, ¿Y a quién le tocó solventar el problema? A otro presidente socialista, José Luis Rodríguez Zapatero. Con el PP se creó el problema y con el PSOE se solucionó.

Igual ha ocurrido en Cataluña, fue en 2017, con Rajoy de presidente, cuando hubo dos referéndum y una Declaración Unilateral de Independencia. Hoy 5 años después, con gobierno de Pedro Sánchez, ha mejorado sustancialmente la convivencia en Cataluña y lo seguirá haciendo. Con el PP se generan las crisis, mientras con el PSOE se resuelven. ¡Aunque a Feijóo no le guste, esta es la realidad!

Leía a un magistrado decir que “Cuando se indulta a alguien, no significa que ha habido algo raro o malo. Significa que por determinadas razones de interés público se acuerda la medida de gracia”. Pero PP y Vox aseguran que jamás habrá perdón para los nacionalistas ¡Oiga, señores de la derecha les recuerdo que para que hubiese democracia, nuestro país tuvo que perdonar las barbaridades cometidas por la dictadura franquista; y se hizo por el bien de nuestra democracia y de nuestro futuro! Esa generosidad ha permitido ser lo que hoy somos como país, no lo olviden nunca.

Por mucho que pataleen y que algunos añoren a Franco y a Tejero, la realidad es que saben que no van a gobernar, saben que hay un acuerdo de investidura y que el PP estará cuatro años más en la oposición. Por eso casi cuatro meses después aún les dura el cabreo por el resultado del 23J. Y no mejoran. Pero el PP debería hacer una reflexión profunda, de por qué hoy está más solo y aislado que nunca y en los brazos de la ultraderecha.

El PSOE ha hablado, dialogado, acordado. En esto consiste la política. Y PSOE, Sumar, PNV, BNG, ERC, Junts, EH Bildu y hasta con Coalición Canaria apoyarán la investidura de Sánchez, que cuenta con el apoyo de 179 votos, mientras Feijóo está solo con Vox y tiene 171. Y la democracia significa que gobierna la mayoría respetando a la minoría.

Por mucho que Feijóo y Abascal inciten las manifestaciones, mientan a conciencia permanentemente y clamen que llegaran las diez plagas de Egipto a España, seguirán en la oposición. Y termino para quien le guste las estadísticas. El pacto obtenido por Pedro Sánchez representa 1.340.000 votos más que lo que obtuvo Feijóo-Vox en las elecciones generales del 23J y supone 5,4 puntos porcentuales más.

Además Pedro Sánchez será investido con más votos que Calvo Sotelo en 1981, González en 1989, Zapatero en 2004-2008 y Rajoy en 2016. Que ocho partidos políticos de diferentes ideologías logren un objetivo común, es todo lo contrario a una dictadura o una demolición del estado de derecho. A esto se le llamada diálogo político en democracia. Pero algunos no saben aún ni lo que es diálogo político ni tampoco lo que significa la democracia. Ahí lo dejo.