Lo competitivas que son las sociedades capitalistas está afectando al individuo. En lugar de mejorar su vida, esta actividad multitarea, así como la tecnología "fácil de usar" y la cultura de la conveniencia, están produciéndonos trastornos que van desde la depresión hasta el déficit de atención, así como el trastorno límite de la personalidad.
Así interpreta nuestra época el filósofo Byung-Chul Han, que ha bautizado nuestros días como la ‘sociedad del cansancio’, que se define, dice, por el malestar generalizado producto de nuestra incapacidad para manejar las experiencias negativas de una época que se caracteriza, afirma, por la excesiva disponibilidad de las personas.
Para Han, el estrés y el cansancio no son solo experiencias personales, sino también fenómenos sociales e históricos. Denunciando un mundo en el que cada respuesta contracorriente puede conducir a un descrédito en la sociedad, en su obra recurre a la literatura, la filosofía y las ciencias sociales y naturales para explorar los riesgos de sacrificar la reflexión intelectual por una conexión neuronal constante.
Para Han, la sociedad que ha acuñado el eslogan 'Yes We Can' produce individuos agotados, fracasados y depresivos.