Este fin de semana se celebró en Colonia (Alemania) la Gamescom, la feria europea más importante de videojuegos, y una de las mayores sensaciones del evento la ha causado Nomad Studio, un pequeño estudio español, con su primer videojuego, Gris, nacido de un gran paisaje pintado con acuarela.

Los programadores Roger Mendoza y Adrián Cuevas unieron fuerzas e ingenio con el ilustrador  Conrad Roset para crear Gris, una travesía onírica en la que el gamer acompaña a un protagonista que ha sufrido una experiencia traumática.

Muy sensorial y con una grandeza visual que se recrea en perspectivas y colores (rojizos y lilas) que evoca el trazo de la acuarela, Gris verá la luz en diciembre para PC y Nintendo Switch, manteniendo su nombre en español también en el mercado internacional. Es un proyecto indie y artístico, pero con “elementos muy evidentes de jugabilidad clásicas, hay desafío", según han explicado sus responsables a la Agencia EFE, así como que para profundizar en la historia “es necesario escuchar y observar, no solamente superar todos los obstáculos. Cada jugador completa la narrativa a su manera", en dos dimensiones y resolviendo puzzles. Entre sus influencias, los responsables del juego reconocen a autores de otros títulos de videojuegos independientes como Journey o Monument Valley.

La pujanza del sector independiente es tal que la feria alemana, que echa el cierre el sábado a su décima edición en la que han participado los grandes actores del videojuego, ha creado un espacio dedicado en exclusiva a este tipo de proyectos.