¿Qué somos los humanos? En unos tiempos en los que algunos, muy pocos, hablan de la pretendida pureza, resulta que el ser humano no es más que una continua mezcla. Incluso en sus orígenes. 

Es lo que acaba de revelar un estudio del Instituto de Biología Evolutiva de la Universidad Pompeu Fabra, en España. Las primeras poblaciones africanas de nuestros ancestros hibridaron con otras especies de seres humanos que ya no existen. 

Se trata de poblaciones que compartían algunos rasgos con las especies que luego dieron lugar al los humanos actuales. Comunidades arcaicas completamente desconocidas

Inteligencia artificial

Pero sus genes se han conservado hasta ahora. Se han ido pasando de generación en generación de sapiens. Ahora, con un análisis en el que se ha empleado inteligencia artificial, estos rastros genéticos han sido detectados en humanos modernos

Ya se sabía que los antiguos sapiens se habían mezclado con comunidades de otros humanos como neandertales y denisovanos. Pero estos nuevos datos arrojan una luz distinta sobre nuestra evolución.

Cada vez parece más claro que ese proceso no fue una línea sólida en la que una especie concreta fue avanzando hasta llegar a lo que hoy somos. Empieza a confirmarse que somos el producto de millones de mezclas de diferentes especies que aportaron sus genes a un ser híbrido que conservó rasgos de todos los implicados.

Es, como dicen los responsables del estudio, la prueba de que las poblaciones africanas primigenias sí tuvieron intromisiones en su evolución. Y vas más allá de África. Los expertos estiman que habrá que revisar los restos de ADN de neandertal en nuestros cuerpos. Estiman que podría ser tres veces más alto de lo que se ha estimado hasta la fecha.