El brote de listeriosis que sufre España, especialmente Andalucía, ya ha afectado al menos a 150 personas. El propio Ministerio de Sanidad ha decidido activar los sistemas de alerta a nivel internacional con las autoridades europeas y la Organización Mundial de la Salud (OMS) después del brote generado en la empresa sevillana Magrudis SL, que comercializaba sus productos bajo la marca La Mechá.

La Junta de Andalucía ha demostrado su incapacidad a la hora de gestionar la crisis ya que el repunte de afectados data de la primera quincena de julio mientras que la orden para retirar el alimento presuntamente contaminado ha sido el pasado 14 de agosto. Ya son dos fallecidos y una mujer afirma que ha pedido a su bebé de 18 meses por culpa de dicho brote.

¿Qué es la carne mechada?

Según la RAE, mechar significa "introducir mechas de tocino gordo en la carne que se ha de asar o empanar". Esta técnica de cocinar la carne en su propia grasa es típica de Andalucía pero su consumo está extendido por toda la península. Se trata de un procedimiento complicado pero que le otorga a la carne un final jugoso y especialmente sabroso.

¿Cómo se prepara?

Como a la hora de cocinar cualquier alimento, lo primero que hay que tener en cuenta es la higiene. Debes tener las manos bien lavadas con jabón y abundante agua y antes de manipular otros alimentos es necesario frotarse otra vez las manos para así evitar la contaminación cruzada.

Para prepararla, se utiliza la cabecera de lomo a la cual se le añade embutido, huevo duro, tiras de zanahoria, jamón serrano incluso tocino salado. Tras gratinar la cabecera y colocar una red para que no se deforme, ya se puede introducir el alimento en el horno. 

En cuanto a su correcta preparación, se debe introducir  los correspondientes ingredientes (tiras de ajo, laurel y aceite de oliva, habitualmente) con un cuchillo o una "aguja de mechar" y hacer orificios en el sentido de las fibras. En aras de mantener la forma de la pieza, primero se debe atar, se deja cocer hasta que la carne esté tierna y tras su enfriamiento, la carne se corta en rodajas como un fiambre.