Oceana ha publicado un preocupante estudio, realizado a partir de un análisis de más de 25.000 muestras de pescado en 55 países en todos los continentes excepto la Antártida, señalando que uno de cada cinco pescados está mal etiquetado, práctica que el trabajo califica de “fraude”.El informe , que se ha dado a conocer en Washington con ocasión de la reunión de líderes de todo el mundo para preparar la conferencia Nuestro Océano, que se celebrará en la capital estadounidense esta semana, señala que el mal etiquetado afecta a toda la cadena del sector del pescado: el comercio minorista, el mayorista, la distribución, la importación-exportación, el envasado y el desembarque. El informe también, con todo, alaba los recientes avances en la Unión Europea desde que Oceana denunció el fraude: éste ha decrecido la mala praxis del 23% en 2011 al 8% en 2015.
La organización internacional de conservación marina
Sostenibilidad
Uno de cada cinco pescados que comemos es un fraude

Uno de cada cinco pescados que comemos es un fraude