Las mujeres se preocupan más por los demás y los hombres son más competitivos. No, no es que estemos hablando de Cuéntame, son los resultados del estudio ¿Siguen vivos los estereotipos de género en el siglo XXI?, que ha publicado el Observatorio Social de la Fundación “la Caixa”.
Los estereotipos de género continúan vivos, pero menos en las generaciones más jóvenes
“Los resultados indican que, a pesar de haberse producido avances en la promoción de la igualdad entre hombres y mujeres en España, los estereotipos de género siguen influenciando las percepciones y decisiones de la ciudadanía, lo que sugiere que todavía queda un largo camino para interiorizar este progreso”. Concluye el estudio. Y añade que “superar los estereotipos tradicionales de género es, sin lugar a dudas, una tarea sin finalizar en nuestra sociedad”.
Eso sí, en el lado positivo, hay que destacar que las generaciones más jóvenes son las que se ciñen menos a estos estereotipos y las que cuentan con visiones más equilibradas sobre el papel que cada uno de los géneros tiene en la sociedad.
Estereotipos de género
“Los resultados son ambivalentes”, explica Marta Fraile, investigadora científica y vicedirectora del Instituto de Políticas y Bienes Públicos del CSIC, que lidera el estudio junto a Paula Zuluaga, del departamento de Ciencia Política de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB).
Los más jóvenes tienden a presentar visiones menos estereotipadas
Y explica: “Por un lado, encontramos que, en términos generales, los estereotipos de género siguen vivos y coleando. Sin embargo, si comparamos entre grupos de edad de los participantes en este estudio, lo que vemos es que los más jóvenes tienden a presentar visiones menos estereotipadas. En cambio, las generaciones más mayores, especialmente los milenials -es decir, el grupo de edad entre 26 y 40 años- y, por supuesto los boomers -mayores de 55-, son las que presentan visiones más estereotipadas”.
Menos estereotipos
Fraile asegura que “los más jóvenes -entre los 15 y los 24 años, la generación Z- son quienes presentan unas visiones más alejadas del estereotipo sobre cuáles son los atributos fundamentales que definen en mayor medida a las mujeres y a los hombres”.
Y no solo eso, “también son quienes presentan unas visiones más equilibradas con respecto a los roles que cumplen en la sociedad. Es el grupo que presenta unas visiones menos estereotipadas”.
Emprendedores y cuidadoras
El estudio preguntaba cuáles de un listado de atributos definían mejor su personalidad. En las respuestas, los hombres señalaban en mayor medida que las mujeres el liderazgo, el emprendimiento o la ambición; mientras que ellas indicaban la empatía, el afecto o la comprensión, especialmente en el grupo entre 26 y 40 años.
Es decir, “los estereotipos de género se confirman, puesto que quienes participan en nuestro estudio consideran que las mujeres son típicamente más empáticas, comprensivas y afectuosas que los hombres”.
Los hombres se identifican en mayor medida con los rasgos definidos en la literatura de psicología social como “agénticos”, especialmente la competición, el riesgo y el liderazgo, con la única excepción de la independencia. En cambio, las participantes femeninas se identifican con los atributos considerados “comunales”, especialmente la empatía y la preocupación por el bienestar de los demás
Cambios, pero no en todos los ámbitos
“Las concepciones masculinas de liderazgo (tanto en el trabajo como en la esfera política) parecen estar menguando. Sin embargo, los cuidados en la familia se siguen percibiendo como roles asociados a mujeres y desempeñados por ellas de forma mayoritaria”, explican las autoras de la investigación.
“Preguntamos a quienes participaron en nuestro estudio: «Algunas personas piensan que hombres y mujeres tienen diferentes habilidades y talentos. En las siguientes situaciones, ¿quién crees que está mejor preparado/a para...?». Las respuestas iban desde «Más los hombres sin duda alguna» a «Más las mujeres sin duda alguna», pasando por «Algo más los hombres», «Hombres y mujeres por igual» y «Algo más las mujeres»”, explican las investigadoras.
El resultado es que los porcentajes generales de respuesta para el caso de los roles tradicionalmente asociados a la población femenina (como cuidar mayores o familiares enfermos, y cuidar a los hijos pequeños) "son más altos, puesto que el 35% de participantes piensan que las mujeres están más capacitadas para este tipo de tareas, confirmando así el estereotipo de que presentan una mayor habilidad para los cuidados, siendo los hombres ligeramente más proclives a expresar esta opinión estereotipada sobre los cuidados”.
Sectores feminizados
También se pidió a los participantes que, de un total de doce ámbitos profesionales, señalaran si consideraban que eran más adecuados para el desarrollo profesional de hombres, de mujeres, o de ambos por igual.
Los porcentajes de quienes declaran que los ámbitos profesionales son más adecuados para ellas "nunca superan el 15% del total de los participantes. Sin embargo, los porcentajes mayores se concentran en los sectores más feminizados tales como la sanidad, la educación, el arte o las tareas de oficina. Por lo que respecta a las diferencias de género, los hombres suelen mostrar visiones ligeramente más estereotipadas, especialmente en el caso del sector sanitario, y presentan diferencias estadísticamente significativas”, señalan las investigadoras.