En las oficinas de Xbox se atraviesa una etapa agitada. La caída en ventas de hardware tras el boom de la pandemia, las recientes subidas de precio, las insinuaciones de integración total a PC, la distribución a terceros de grandes producciones (que ya no son exclusivas) y una comunicación más distante de lo habitual, han alimentado la sensación de que la marca se aleja de su base de jugadores.
En medio de ese ruido, la presidenta de Xbox, Sarah Bond, ha vuelto a insistir en que el concepto de consola no desaparece para ellos, puesto que siguen situándola en un papel determinante dentro del plan de Microsoft.

Los mismos juegos en distintas plataformas
En una reciente entrevista con Fortune Magazine, Bond resume la filosofía actual de la marca como una especie de compromiso para facilitar el acceso a la mayor cantidad de juegos en distintas pantallas, pero sin renunciar a la tradicional consola de salón. De hecho, afirma que “el hardware es absolutamente central en todo lo que hacemos en Xbox, porque nuestros jugadores más valiosos aman la experiencia en consola”, aunque esto más que una explicación parece una frase pensada para tranquilizar los ánimos entre quienes anticipan que todo se trasladará directamente a la nube pasando por PC.
La directiva confirma además que ya trabajan en la próxima generación de consolas. Habla de un dispositivo “potente”, capaz de acompañar al usuario y de respetar esa biblioteca acumulada durante años. De nuevo, otra explicación que no aporta nada y que tan solo recupera la idea de otros mensajes recientes promovidos por la casa de Redmond, que en los mismos términos presume de una alianza a largo plazo con AMD para diseñar el chip de la futura Xbox y de una gama de hardware que combinará consola, dispositivo portátil, PC y accesorios alrededor de un mismo entorno.
La realidad del mercado
El problema es que la previsión a medio y largo plazo choca con una complicada realidad. La marca arrastra cierres de estudios, despidos y proyectos cancelados, mientras Game Pass ha subido de precio y los grandes lanzamientos propios aparecen en otras consolas y en PC. Con todo esto, gran parte de la base de jugadores percibe una depreciación en el valor del hardware de Microsoft y las redes sociales se han convertido en un territorio poco amable para los defensores de la marca.

¿Habrá consola Xbox de próxima generación?
Sí, Bond confirma que habrá nueva máquina, que la alianza con AMD es real y que la apuesta por la compatibilidad y la continuidad de la biblioteca no corre peligro alguno. Ahora lo lógico sería avanzar hacia el terreno práctico, porque Microsoft necesita traducir ese mensaje en precios, plazos y la recuperación de un catálogo propio. Algo de comunicación directa con la gente que sigue jugando en Xbox tampoco estaría de más.
The Next Generation is coming….
En cualquier caso, esta vez la venidera guerra por la próxima generación de consolas no solo se librará en las trincheras del hardware. A estas alturas podría decidirse por el grado de confianza entre la marca y sus usuarios. Personalmente, ¿qué esperas de la próxima generación de Xbox? ¿Mucha integración con PC y pocos exclusivos, pero con acceso a muchas tiendas? Ya veremos cómo se resuelve.
Síguenos en Google Discover y no te pierdas las noticias, vídeos y artículos más interesantes
Síguenos en Google Discover