Si hay una profesión que soluciona la vida de quien la ejerce es la de futbolista de primera división. No es nada fácil llegar a la élite, pero los que lo consiguen, ven como su cartera se engrosa de forma significativa. De media, en España, los jugadores de La Liga cobran alrededor de 1,5 millones de euros al año. Un dinero que, bien gestionado, puede sustentar a varias generaciones, pero que, de no hacerlo, se quema más rápido que la leña. Por esa razón, los profesionales del balompié acostumbran, cada vez más, a invertir su patrimonio en startups que les generen beneficio para aumentarlo.
Inversiones en el mundo del fútbol
Uno de los negocios que están de moda es la inversión o la fundación de equipos de fútbol. No son pocos los jugadores que han decidido poner billetes en este sector. David Villa, exfutbolista de la selección española, creó DV7 Academy, una red internacional de academias que cuenta con equipos desde prebenjamines hasta juveniles. Además, el proyecto de ‘el Guaje’ subió otro escalón con la compra del CF Benidorm hace dos años. No es el único que ha invertido en el futbol base. El que fuera medio centro del Real Madrid, Toni Kroos, compró el Club las Encinas de Boadilla y lo reestructuró formando lo que es ahora la Toni Kroos Academy.
En el fútbol aficionado, jugadores como Bernardo Espinosa, Alfonso Herrero o Miguel Ángel Atienza se han unido a otros deportistas como Rudy Fernández, José Manuel Calderón y Víctor Claver para crear un vehículo inversor de profesionales del deporte: Players Hub 360. Este fondo ha adquirido el Atlético Cañada Alcorcón, un equipo que ha ascendido esta temporada de la Primera Regional Madrileña a Preferente. El objetivo es llevar al equipo al fútbol profesional, y ya han puesto la primera piedra para ello. Estos solo son unos pocos ejemplos de esto, pero hay muchos más.
Negocios más allá del deporte
Fuera del mundo del fútbol, los deportistas también encuentran otros lugares a los que llevar su dinero. El centrocampista del Atlético de Madrid, Marcos Llorente, colabora desde hace cuatro años con la marca de bebidas Miwi. Una alianza que continuará dando sus frutos después de que la empresa haya aumentado su facturación y anunciase su expansión al mundo de los refrescos con un producto sin azúcar.
Uno de los negocios que más han prosperado es la firma de ropa de Cristiano Ronaldo, que desde el año 2013 produce ropa interior para hombre. El portugués cuenta con más inversiones que hacen fuerte su imperio, como una cadena de hoteles de lujo, de restaurantes, un canal de televisión y la compra del periódico más vendido de Portugal, una clínica de trasplante capilar… En definitiva, todo lo que toca Cristiano, lo convierte en billetes, muchos billetes.
No solo las super estrellas logran engrosar su patrimonio gracias a los negocios. Martin Braithwaite, exjugador del F.C. Barcelona, tiene una empresa valorada en más de 250 millones de dólares que dedica la mayor parte de su actividad al mercado inmobiliario, aunque también cuenta con una línea de ropa junto a su mujer que hace buenos números en Francia. Se especuló con la posibilidad de que el jugador danés comprase su antiguo club, el RCDE Espanyol, señal de la buena salud que gozan las cuentas del delantero.
Gerard Piqué es otro de los ‘futbolistas empresarios’ más sonados del mundo. Desde 2018 es presidente y consejero del grupo Kosmos, un entramado que cuenta con varios negocios dentro y fuera del mundo del fútbol. Es dueño del F.C. Andorra y durante varios años se ocupó de la organización de la Copa Davis, la cual quiso revolucionar, aunque no salió como esperaba y la Federación Internacional de Tenis rompió su acuerdo con Kosmos. La actividad más conocida de Piqué en estos momentos es la Kings League, una competición de fútbol 7 que se ha expandido hacia varios países y cuenta con la presencia de muchos de los creadores de contenido más populares del mundo. La Kings League se ha convertido en un producto en el que también invierten futbolistas como Lamine Yamal, Jules Koundé, Eduardo Camavinga o Neymar Jr.
Andres Iniesta o Sergio Ramos también han aumentado su fortuna fuera del mundo del deporte. El caso del manchego es uno de los que no salió excesivamente bien. Su empresa más mediática es la Bodega Andrés Iniesta, siendo la que peores números ofrece. Desde su creación en 2010, la bodega ha dado pérdidas, aunque el resto de los flotadores económicos que posee Iniesta (alquiler de inmuebles e inversiones financieras) han compensado los malos resultados. Por su parte, Sergio Ramos posee inversiones en varias ramas diferentes. Ha plasmado su pasión por los caballos en su Yeguada SR4, además de contar con un ‘imperio inmobiliario’ y ser uno de los inversores de la startup Fever, encargada de rastrear y encontrar planes de ocio cercanos a la ubicación de quien la utiliza.
A medida que los salarios crecen, las inversiones lo hacen al mismo ritmo. La carrera del futbolista es corta, por lo que buscan crear fuentes de ingreso que permitan a los profesionales hacer crecer su patrimonio una vez retirados del deporte de élite.