CCOO y UGT han salido este miércoles a la calle en toda España para mostrar su descontento por la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que permite el despido objetivo de los trabajadores por bajas intermitentes, aunque sean justificadas. Las concentraciones tienen lugar en el Congreso de los Diputados en Madrid y en las delegaciones de Gobierno del resto de las comunidades, por ejemplo en Valencia o A Coruña.

Con estas movilizaciones, los sindicatos pretenden dar respuesta a la alarma social que ha generado la sentencia del Tribunal Constitucional que avala el artículo 52 apartado D del Estatuto de los Trabajadores. El artículo certifica que el despido del trabajador sería justificado si falta ocho días durante dos meses por enfermedad leve, exceptuando casos de cáncer o enfermedades graves.

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"Esta sentencia nos ha hecho dar una respuesta en clave de movilización para pedir inmediatamente la corrección y derogación de este artículo del Estatuto de los Trabajadores, que está teniendo ya efectos paralelos y a cuál más preocupante", ha asegurado el secretario general de CCOO, Unai Sordo, durante la presentación de la movilización.

En esta línea, alertan de que se están empezando a dar más despidos motivados con esta causa y los trabajadores están acudiendo a sus puestos de trabajo sin estar recuperados de sus dolencias del todo ante el riesgo de sus despidos, especialmente en el caso de las mujeres.

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha resaltado que con las concentraciones se quiere situar y poner el acento en que la mayoría de los trabajadores y el conjunto de los ciudadanos españoles rechazan la sentencia del TC. "Esta sentencia es la gota que ha colmado el vaso", apunta el máximo representante de UGT, que también ha recordado que las organizaciones sindicales llevan tiempo exigiendo la derogación de las reformas laborales.

Para los sindicatos, la sentencia pone "blanco sobre negro hasta qué punto la reforma laboral solo sirve para explotar más a los trabajadores sin ningún tipo de seguridad ni derecho y hasta qué punto puede ser cruel e inhumana con algunas personas". De hecho, consideran esta sentencia como favorable solo para las empresas y "una aberración de los derechos humanos".

Ambos líderes sindicales afirman que estas concentraciones se enmarcan dentro de una demanda sindical más general que tiene que ver con la derogación de las reformas que se hicieron durante el periodo de austeridad: las laborales, la de pensiones y la de prestaciones de desempleo. Para ambos sindicatos, derogar las reformas laborales es una "necesidad", pero acabar con el artículo 52 apartado D del Estatuto de los Trabajadores "es urgente".