Antes, solo cuando acababa la Navidad y comprábamos los regalos de los Reyes Magos empezaban los descuentos de las rebajas. Pero en el año 2012, el Gobierno español aplicó una liberalización al comercio de nuestro país según la cual cada establecimiento o cadena comercial  determina a partir de qué momento inicia sus rebajas. Así, desde que se abrió el periodo liberalizador muchos comercios y grandes cadenas, sobre todo de ropa y complementos, inician las rebajas en los primeros días de enero, para aprovechar el tirón de la venta de regalos por Reyes Magos.  Las tiendas pueden incluso encadenarse a lo largo de todo el año, lo que, sumado a la creciente penetración en España de fenómenos como el "Black Friday", nos hace percibir que podemos encontrar ofertas y saldos permanentemente. La única obligación que tienen los comercios es avisar del comienzo y del final de su periodo de descuentos, y las organizaciones de consumidores instan a que estos espacios cumplan una serie de normas que garanticen los derechos de los compradores.

Las taras deben advertirse

Por ejemplo, y según ha recordado FACUA a la Agencia EFE, la ley plantea que al menos la mitad de los artículos tengan descuentos para poder publicitar que una tienda está de rebajas. Además, muchos establecimientos estiran el periodo de rebajas hasta dos meses aunque les queden muy pocos artículos con descuentos, a sabiendas de que las autoridades realizan muy pocas inspecciones. Y en caso de que un producto se venda rebajado porque esté defectuoso, y no se informe de la tara, el consumidor siempre tiene derecho a que se lo reparen o sustituyan por otro igual y, si no queda ninguno, deben devolverle el dinero. Por çultimo, el precio rebajado de los objetos debe aparecer al lado del original y si no, el porcentaje de descuento tiene que estar indicado de "de forma clara".
La Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) ha destacado además que las rebajas sólo son relativas a los productos de temporada y no a los saldos. Y si un comercio cambia su política de devoluciones o no permite el pago con tarjeta en periodo de rebajas, debe informar al consumidor de estas modificaciones.

Conservar el ticket

Pensando en el lado del consumidor, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), hace hincapié en que, para evitar las compras compulsivas, se elaboren listas con lo que uno necesita. Además, hay que conservar el tique o factura simplificada de las compras porque si se pierde, también lo hace el derecho a cambiar, devolver o reclamar, ha advertido la OCU. Ante cualquier problema, la organización ha subrayado que hay que tener claro que se debe actuar igual que en cualquier otro momento porque "se recortan los precios, pero nunca los derechos que se tienen como consumidor".