Las dos grandes reformas acometidas por el Gobierno de coalición en la anterior legislatura están consiguiendo holgadamente sus objetivos, entre los que destaca el llenado de la hucha de las pensiones. Por un lado, la modificación del mercado laboral, pactada con los sindicatos y la patronal, ha disparado el número de ocupados hasta el nivel más alto de la historia, superando los 21,2 millones de trabajadores. De la mano de la reducción de la temporalidad y el aumento de los contratos indefinidos, los ingresos por contribución a la Seguridad Social son más elevados y crecieron a un ritmo de casi el 10% en agosto.

El dinamismo del empleo es una de las palancas de la Seguridad Social, pero no es la única que está reforzando el sistema. La otra política determinante es la que afecta a las pensiones, que con sus modificaciones ha colaborado a un llenado de la hucha no conocido en años. El Ejecutivo ya contemplaba que las nuevas medidas establecidas tuvieran un efecto positivo y el nuevo Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) ha cumplido sobradamente con su trabajo, según evidencia los resultados de la Comisión de Seguimiento del Fondo de Reserva de la Seguridad Social.

El órgano se ha reunido este viernes por primera vez desde 2018 y ha contado con todas las partes, “devolviendo la normalidad al sistema de pensiones y reforzando la confianza en su sostenibilidad y suficiencia". En representación del Gobierno, la reunión ha estado a cargo del secretario de Estado de la Seguridad Social y Pensiones, Borja Suárez. La comisión está compuesta por representantes del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital y del Ministerio de Hacienda y Función Pública, así como por miembros de las organizaciones empresariales (CEOE y Cepyme) y de los sindicatos (UGT, CCOO, CIG y USO).

La hucha vuelve a llenarse y acabará el año con 5.500 millones de euros

La hucha de las pensiones vuelve a llenarse gracias a las últimas medidas acometidas; no obstante, está muy lejos de alcanzar los niveles que alcanzó en 2011, 66.815 millones con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Con la llegada de Mariano Rajoy al poder en 2012, la caída fue meteórica, perdiéndose miles de millones cada año. Así, tras sus dos legislaturas, el fondo destinado a garantizar y mantener las pensiones a futuro pasó de superar los 60.000 millones a casi desaparecer. Desde entonces, un arduo trabajo ha conseguido estabilizar la curva y devolverla a la senda ascendente.

El Gobierno ya anticipó en agosto unas buenas cifras de cierre, pero este viernes las ha actualizado al alza. La hucha contendrá más de 5.500 millones de euros a finales de año, 150 millones más de lo previsto hace algo más de dos meses y la mayor cantidad en cinco años. Para los agentes sociales presentes en la Comisión las causas de esta recuperación del Fondo son claras. Durante el anterior mandato del Partido Popular (PP) “se optó por adelantar su consumo en lugar de adoptar medidas de refuerzo de ingresos”, lo que llevó a la hucha “hasta casi su liquidación”, ha denunciado CCOO.

Esto ha cambiado y medidas muy criticadas por la oposición, pero validadas por la Comisión Europea, han actuado. Así, el MEI, que comenzó a aplicarse en enero de este año y sustituye al anterior factor de sostenibilidad de Rajoy, ha recaudado hasta la fecha unos 1.450 millones de euros, montante que se incrementará progresivamente en los próximos meses hasta el cierre del ejercicio. Además, a estos ingresos hay que añadir los excedentes de las mutuas, que han ascendido a unos 1.168 millones de euros.

Los últimos datos publicados por el departamento dirigido por José Luis Escrivá, relativos al 3 de octubre, confirman el fuerte dinamismo del mercado laboral. Además, el incremento de la calidad del empleo no solo beneficia a los trabajadores, sino que está contribuyendo a reforzar la sostenibilidad del sistema de pensiones, de forma que los ingresos por cotizaciones sociales han registrado hasta agosto (último mes con datos disponibles) un crecimiento del 9,8%, un 8% si se descuentan los efectos del MEI.

La suma de ocupados es también vital, sobre todo ante la preocupante llegada de la generación del baby boom a la jubilación. Actualmente, la ratio cotizante por pensionista se sitúa en 2,43, valor más alto de toda la década. Cada pensionista cuenta actualmente con casi dos trabajadores y medio en activo para pagar su pensión, cifras que dan esperanza de cara a futuro. La hucha de las pensiones se llena, pero aún no es suficiente. 5.500 millones ya engrosan en el Fondo y la progresión definida es positiva; sin embargo, deberán realizarse los ajustes necesarios para la llegada de la gran jubilación y, sobre todo, evitar volver a gastarse lo guardado para nuestros mayores en otros cometidos.