Pablo Hernández de Cos, gobernador del Banco de España, se ha mostrado preocupado porque las subidas de los precios, que inicialmente afectaron sobre todo a las materias primas y los alimentos, se han extendido en los últimos trimestres al resto de bienes y servicios, mostrando signos de mayor persistencia. Para combatir esto, de Cos ha remarcado que una dinámica de moderación de los salarios y una reducción de los márgenes comerciales evitarían la aparición de un bucle de retroalimentación entre precios y salarios.

Es por esta situación por la que, el gobernador del Banco de España, ha insistido en impulsar el pacto de rentas, que pasa por que empresas y trabajadores, en el marco del diálogo social, acuerden compartir la "inevitable" pérdida de renta nacional que supone el aumento de los precios de las importaciones de productos básicos. Además, de Cos considera que el pacto de rentas debería incluir al sector público, evitando tanto un impulso fiscal generalizado como un uso generalizado de las cláusulas de indexación automática en las partidas de gasto en este contexto de escalada inflacionista.

"Evitar este bucle es precisamente el objetivo prioritario del acuerdo de rentas que venimos defendiendo en los últimos meses en el Banco de España", ha remarcado el gobernador durante su intervención en la primera Conferencia anual sobre Economía Española organizada por el Banco de España. Hace referencia, concretamente, al aumento de la inflación en España en 2021, que se aceleró aún más a principios de 2022, alcanzando 10% en junio.

No obstante, según las últimas proyecciones del Banco de España, publicadas el pasado mes de junio, en ausencia de nuevos shocks o de una escalada de la guerra en Ucrania, se prevé que la economía española siga una senda de recuperación gradual, que podría alcanzar los niveles de PIB prepandémicos en el tramo final de 2023.

Diseño de un plan plurianual de consolidación fiscal

Desde el Banco de España han vuelto a advertir de que, en los próximos años, el endeudamiento público se mantendrá muy cerca o incluso superará los niveles actuales, a menos que se aplique un ambicioso plan de ajuste fiscal. En concreto, varias simulaciones indican que, si no se realiza ningún ajuste fiscal en España en los próximos años, la presión ejercida por el envejecimiento de la población sobre el gasto público hará que aumente la ratio deuda pública/PIB.

Por ello, el organismo insiste en que se debe diseñar cuidadosamente un plan plurianual de consolidación fiscal y aplicarlo con rigor una vez que la economía española se encuentre en la senda de la recuperación. En este sentido, cree que cuanto antes se diseñe y anuncie dicho plan integral será mejor, ya que esto ayudaría a aumentar la confianza y a reducir la incertidumbre, algo especialmente importante en el contexto de la normalización de la política monetaria.