El senador popular  Pedro Agramunt es señalado como "áltamente sospechoso" de haber representado los intereses de las dictaduras de Azerbaiyán y de Siria a cambio de dinero, regalos y, según algunos testimonios, los servicios de prostitutas mientras ejercía de observador electoral. Agramunt fue presidente de la  Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, cargo del que se vio obligado a dimitir por las acusaciones de corrupción y tras haber perdido la confianza del Partido Popular Europeo, que votó una moción en la que se le instaba a dimitir. Agramunt había realizado en aquel momento un viaje a Siria, donde se alojó en hoteles de lujo, para mantener un encuentro con Bashar El Assad y se ofreció desde allí a pagar viajes similares a otros miembros del Consejo de Europa para suavizar sus posiciones sobre las acciones de la dictadura siria. Los nuevos datos sobre las sospechas de corrupción del senador del PP Valenciano provienen de un extenso informe sobre la corrupción, encargado por el Consejo de Europa a un grupo de expertos independientes, compuesto por cuatro jueces europeos. 

Elegido por Azerbaiyán

El documento desgrana en más 200 páginas distintos casos de malas prácticas en el seno del Consejo de Europa. Y pone bajo sospecha la misma elección de Agramunt como presidente de la Asamblea, en la que apunta a que Azerbaiyán "desempeñó un papel", "incluso con financiación", y que su campaña fue dirigida por Muslum Mammadov, quien fue lobista para Bakú. Además, la Comisión independiente asegura que existen numerosos ejemplos que indican que el senador 'popular' defendió los intereses azeríes a la hora de tomar decisiones en la Asamblea. Los azerbaiyanos habrían asegurado la elección de una Asamblea Parlamentaria amiga regalando alfombras valoradas en miles de euros -tantas que la embajada de Azerbaiyán tuvo que destinar una de sus habitaciones sólo para almacenarlas-, aparatos electrónicos de lujo, relojes, joyas, vacaciones pagadas, prostitutas y dinero en efectivo o mediante transferencias realizadas por compañías anónimas. 

Además, "existen pruebas", apunta el informe, de que Agramunt intervino borradores de informes del secretariado de la Asamblea para minimizar las críticas hacia las autoridades azeríes y está también probado que actuó contra el código de conducta al desvelar un borrador al representante de Azerbaiyán en la Asamblea, Samad Seyidov, del que recibió "instrucciones" con respecto al informe. 

Así, la investigación concluye que Agramunt "quebró el principio de neutralidad, imparcialidad y objetividad" que van aparejados al código de conducta para misiones de observación de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (APCE) y del código del comité de seguimiento.

El segundo de Cospedal y Jordi Xuclà también bajo sospecha

En el informe también se señalan malas prácitcas del diputado del PDeCAT Jordi Xuclà y del número dos del Ministerio de Defensa, Agustín Conde. De Xuclà el informe destaca su actuación "sospechosa" como jefe de la delegación de la misión de la APCE en las elecciones parlamentarias de 2015 en Azerbaiyán.

Pone la lupa en una serie de borradores preliminares sobre las condiciones en la que se celebró la cita electoral, en la que supuestamente Xuclà habría preparado una declaración preliminar por su cuenta durante la misma tarde de las elecciones. Aunque el Consejo señala que las circunstancias en torno al informe son "inusuales", exonera a Xuclà de acusaciones más graves tras escuchar sus alegaciones.

Con respecto a Conde, el informe indica que durante su labor como co-observador en las elecciones de 2015 su compañero de misión, el polaco Tadeusz Iwinski recibió instrucciones en forma de declaraciones preparadas por parte del belga Stef Goris, parlamentario de la APCE hasta 2007 y que el informe señala como figura "esencial" en el entramado de influencia de Azerbaiyán. Aunque la investigación señala que Condé no recibió personalmente las indicaciones,"sí era responsable conjuntamente de la redacción y del contenido de las declaraciones que fue presentado en su nombre", por lo que se saltó el código de conducta de misión de observación electoral.

El Partido Popular ha declarado a El Plural estar estudiando aún el asunto y ha prometido ponerse en contacto con este diario, algo que no ha ocurrido en el momento de publicar esta noticia.