Telefónica ha sido adjudicataria del contrato de emergencia de Metro de Madrid para el suministro de 60 terminales móviles vía satélite, con baterías adicionales, para garantizar las comunicaciones en caso de un nuevo apagón eléctrico como el registrado el pasado abril en la Península Ibérica, que provocó la detención de 230 trenes de la red del suburbano ,44 de ellos dentro de túneles y 186 en estaciones, obligando a desalojar a 150.000 pasajeros.
Concretamente, la empresa pública ha adjudicado a Telefónica un contrato de emergencia para el suministro de estos terminales por un valor de 210.652,23 euros (IVA incluido), con una vigencia de seis meses, según detalla la documentación adelantada por 20minutos y consultada por Europa Press.
"Ante la posibilidad de que un apagón total vuelva a producirse, se considera imprescindible dotarse de equipamiento que permita mantener comunicaciones de voz operativas que en la medida evite riesgos para la vida de los viajeros y trabajadores de Metro", se justifica en el contrato.
El contrato contempla 60 teléfonos, cada uno con batería extra y línea activa, incluyendo la cuota mensual, además de un presupuesto adicional que cubre 10 horas de conversación por línea durante el periodo de servicio.
"La imposibilidad de garantizar las comunicaciones mínimas en caso de nuevo fallo energético comprometería gravemente las labores de evacuación y coordinación ante una emergencia, por lo que resulta imprescindible adoptar, con carácter urgente e inaplazable, medidas que aseguren la continuidad de las comunicaciones mediante sistemas independientes del suministro eléctrico terrestre, como las comunicaciones satelitales", alega.
Durante el apagón masivo de abril, el servicio del suburbano tuvo que ser suspendido por completo desde las 12:30 h hasta las 08:00 h del día siguiente. La documentación indica que la falta de energía "incrementó la incertidumbre y supuso un riesgo directo para la integridad de las personas, al no poder realizarse peticiones de auxilio en caso de incidente".
Metro de Madrid justifica esta medida por la “inestabilidad constatada en la calidad del suministro eléctrico, evidenciada por el apagón” y la carencia de “garantías por parte de los operadores eléctricos de que esta situación no vuelva a repetirse”, lo que consideran “una amenaza crítica e inmediata en un servicio esencial que transporta diariamente a cientos de miles de viajeros”.
El suburbano madrileño da servicio a unos 2,5 millones de personas al día, con una red que incluye 303 estaciones, 562 ascensores y 1.709 escaleras mecánicas, todas ellas alimentadas por energía eléctrica. Durante el apagón, unas 15 personas quedaron atrapadas en ascensores y tuvieron que ser rescatadas manualmente por el personal de Metro con apoyo de Bomberos.