El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha constatado el apoyo masivo de sus accionistas -también de los grandes fondos de inversión presentes en su capital- durante la junta general celebrada este viernes en Bilbao. Un encuentro que ha reunido al 75,52% de los accionistas, de forma presencial o telemática, -superando así el quorum necesario para repartir el dividendo de involucración- y que ha estado marcada por una sucesión de récords y aplausos a la gestión de la eléctrica, además de la aprobación de todos los puntos del orden del día, entre los que se encuentran la gestión de la cúpula y las cuentas récord de 2023, entre una veintena de cuestiones. 

Iberdrola ha optado un año más, por tercer año consecutivo, por repartir un dividendo extra -de involucración- entre sus accionistas con el objetivo de incentivar la participación en la junta general. Como única empresa del Ibex, la compañía -y sus propios accionistas- han aprobado el dividendo extra de 0,005 euros brutos por acción (un euro bruto por cada 200 acciones) para los accionistas con derecho a participar este viernes en la junta ordinaria. Un pago extra que tiene lugar por haber superado el quorum del 70% en la junta y, posteriormente, dar el visto bueno a la aprobación de dicho punto del orden del día, con un voto medio de todos los puntos del orden del día de más del 98%. 

El pago extra de 0,005 euros brutos por acción se suma al dividendo récord repartido ya por Iberdrola en el último ejercicio, con la perspectiva incluso de mejora de cara al futuro. Y es que la compañía tiene previsto repartir 3.500 millones de euros entre sus accionistas este año con cargo a los resultados de 2023, con un incremento del 10,8% frente al año anterior, hasta los 0,55 euros por acción. A esta cantidad histórica hay que sumar el dividendo de involucración, con 0,005 euros más por cada título, aprobado este viernes en la junta. Este ha sido uno de los anuncios que ha despertado los primeros aplausos de los accionistas presentes en la sala pero no ha sido el único. 

Apoyo de los grandes fondos de inversión

Durante su discurso, Ignacio Sánchez Galán ha celebrado la evolución de las cuentas financieras de la compañía, así como la mejora de las previsiones a futuro. Una serie de cifras que ha ido despertando los aplausos de los asistentes en la sala de su sede social bilbaína anuncio tras anuncio. Y es que el presidente, y la cúpula, han recibido el apoyo de la mayoría de los accionistas -incluidos los grandes fondos- a la gestión de la eléctrica, con el visto bueno a los veinte puntos del orden del día. 

Es más, el presidente ha agradecido el apoyo y la labor de empleados, accionistas y grandes fondos de inversión presentes en su capital, entre ellos el fondo soberano de Qatar, la Autoridad de Inversiones de Qatar (QIA, por sus siglas en inglés). Con más de un 9% del capital de Iberdrola, Galán ha querido agradecer la presencia de Sheikh Mohammed Al Thani, representante del fondo QIA, de forma presencial en la sede social de Iberdrola, en Bilbao. 

También el turno de intervenciones y preguntas de los accionistas, con apenas seis intervenciones presenciales y tres de forma online, ha estado protagonizado por los mensajes de felicitación a Galán y a la cúpula de Iberdrola. Es más, algunos de los accionistas han reclamado que la junta se centre en aspectos de la compañía y no en "intereses personales", despertando de nuevo los aplausos de la sala. "Queremos una junta general continua para estar en contacto continuo con los accionistas", ha defendido el presidente de Iberdrola tras las preguntas de sus accionistas. 

Durante su repaso a los resultados récord de 2023, con un beneficio de 4.803 millones de euros, y la mejora de las previsiones para los próximos años, Galán ha centrado la apuesta de Iberdrola en la electrificación, "un proceso imparable" desde su punto de vista. Así, la eléctrica contempla un plan de inversión récord para el periodo 2024-2026 por valor de 41.000 millones de euros, con “récord sobre récord”. El centro de este plan de inversión será el mercado de Estados Unidos, con un 35% del total de las inversiones; seguido de Reino Unido, la Península Ibérica o México y Brasil. En esta línea, la eléctrica mantiene su apuesta por la energía eólica marina en todo el mundo, con "proyectos en construcción" y "no sueños".

No obstante, a pesar de apostar por el mercado estadounidense y otros enclaves importantes en su negocio, Galán ha querido reiterar su contribución a la economía del País Vasco, donde tiene radicada su sede social, "nuestra cuna desde hace 120 años". "Este volumen de inversión beneficiará a los productores vascos. Vamos a seguir haciéndolo", ha defendido el presidente de Iberdrola ante las preguntas de los accionistas. 

"Récord tras récord"

De cara a 2026, la eléctrica prevé alcanzar un EBITDA de entre 16.500 y 17.000 millones de euros; un beneficio neto de entre 5.600 y 5.800 millones de euros; la creación de 10.000 nuevos puestos de empleo; alcanzar una contribución fiscal de 25.000 millones de euros; realizar compras por valor de 40.000 millones en estos tres años o una mejora de la inversión en sostenibilidad. Todos estos récords acompañados por una mejora de la retribución al accionista, con el reparto de un dividendo de 11.000 millones de euros en el acumulado entre este 2024 y el próximo 2026, en los próximos tres años, para alcanzar los 0,61 euros por acción en 2026. “Un futuro prometedor con un plan de inversión récord” que ha terminado, de nuevo, con aplausos en la sala. 

"Estoy orgulloso de que esta empresa esté en máximos históricos de capitalización. Hace unos años muchos no lo habríamos creído" -ha celebrado Galán ante el apoyo de sus accionistas- "Valemos 80.000 millones de euros, valemos más que todas las energéticas españolas juntas. Valemos más que los bancos". Sobre la guerra Iberdrola vs. Repsol, solo uno de los accionistas que ha intervenido durante la junta ha hecho referencia a la "batalla por greenwashing"sin producirse ninguna respuesta ni alegación adicional.

Más allá del visto bueno a las cuentas de Iberdrola de 2023 y de la gestión de la cúpula, casi el 100% de los accionistas han ratificado la modificación de ciertos artículos del reglamento para mejorar la relación entre la cúpula y los propietarios de las acciones de la eléctrica, así como la política de remuneraciones de los miembros del consejo o el propio dividendo de involucración. Asimismo, la junta ha dado el visto bueno a los aumentos de capital y a la reelección de tres miembros del consejo de administraciónNicola Mary Brewer y Regina Helena Jorge Nunes como consejeras independientes y de Iñigo Víctor de Oriol Ibarra como externo. El consejo de administración de Iberdrola queda así formado por 14 miembros y con el apoyo de la gran mayoría de sus accionistas, con más de un 98%, a sus planes presentes y futuros.