El Banco Popular ha registrado unas pérdidas de 3.485,3 millones en 2016, las mayores sufridas por una entidad que no haya sido rescatada con dinero público. Esta cifra influye los saneamientos del ladrillo anunciados por el expresidente Ángel Ron con la ampliación de capital de junio, así como el impacto de las cláusulas suelo, de 229 millones.

Tras la presentación de los resultados, las acciones se han desplomado más de un 8,5% y se cotizaban en el IBEX 35 por menos de 0,87 euros tras cerrar ayer la jornada en los 0,942 euros por acción. 

Reestructuración y elevará las pérdidas de 2016 a 3.000 millones

Los depósitos de la clientela también cayeron, un 6,2%, y se situaron en 82.840 millones de euros, según informó el banco. En cuanto a los principales márgenes de la cuenta de 2016, el de intereses se redujo casi el 7% y quedó en 2.096,5 millones, después de que los ingresos por dividendos bajaran un 18%; el resultado de operaciones financieras (ROF) cayera un 61,2%; y el apartado de "otros ingresos de explotación" bajara un 29,4%. Las ganancias por comisiones netas también bajaron, un 9,5%, hasta 539 millones de euros, lo que condujo a un margen bruto de 3.430 millones, inferior en un 17,6% al obtenido un año antes.

En cuanto a los gastos, los de administración se elevaron un 17,7% y los de personal, un 32,2%, aunque tras el proceso de ajuste de oficinas y plantillas, la entidad asegura que ahorrará cada año unos 200 millones. De esta forma, el margen de explotación o resultado de la actividad típica bancaria se situó en 797,8 millones tras bajar un 53% y el resultado de la actividad de explotación arrojó unas pérdidas de 3.259 millones. .