El Gobierno subirá otra vez los impuestos del alcohol y el tabaco. Lo hará en el Consejo de Ministros de mañana viernes  porque necesita cumplir con las nuevas exigencias impuestas por Bruselas a cambio de permitir un déficit para este año del 6,5% y no del 4,5% al que se había comprometido el Gobierno. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, necesita recaudar más, porque a pesar de haber perpetrado la mayor subida de impuestos de un solo golpe en lo que llevamos de Democracia (IVA, IRPF, supresión de bonificaciones y exenciones), no recauda lo suficiente y espera ingresar con esta subida unos dos mil millones de euros anuales.

El PP estuvo en contra de la Ley antitabaco, ahora la mantiene
La mayoría de los ciudadanos aprueba que se suban los impuestos del alcohol y tabaco porque consideran que así se desincentiva su consumo. Curiosamente el PP se opuso virulentamente a la Ley del Gobierno Zapatero que prohibió fumar en espacios públicos, la misma ley que estaba vigente ya en toda la Unión Europea, por no hablar de Estados Unidos y muchos países latinoamericanos. Iniciaron una campaña para denunciar el intrusismo gubernamental en la vida privada de las personas y -como siempre- la entonces 'lideresa’ de Madrid, Esperanza Aguirre, intentó saltarse la ley en bares y restaurantes. El PP ahora en el Gobierno dejó la Ley antitabaco tal y como la dejó el Gobierno de Zapatero. Los estudios de salud pública son concluyentes, las políticas contra el tabaquismo ahorran muchos millones a las administraciones públicas en sanidad.
Paralelamente a esa campaña, el PP se erigió en defensor del vino cuando el Gobierno de Zapatero subió los impuestos del alcohol, de los que se libraron precisamente el vino y la cerveza. Al PP le dio igual, hizo una campaña como si la subida afectara también al vino y mítica es ya la frase de Mariano Rajoy en un mitin, copa de vino en mano, gritando "viva el vino". El Gobierno del PP va a subir el impuestos de las bebidas alcohólicas (menos el vino y la cerveza) hasta un 10% y los del tabaco entre un 2 y un 5%. Especialmente subirán los impuestos del tabaco de liar, al que habían recurrido muchos fumadores porque la "picadura" es mucho más barata que la cajetilla. Con la subida de mañana casi el 80% de lo que se paga por una cajetilla de tabaco es de impuestos.

Descenso sostenido de fumadores desde la Ley Zapatero
La eficacia de las leyes antitabaco estaba demostrada en todos los países donde se había implantado y en España ocurre lo mismo. Desde su entrada en vigor, la venta de tabaco ha descendido espectacularmente y se ha pasado de los 4 mil millones de cajetillas vendidas en al año 2.009 a la mitad, 2.600 millones de cajetilla en el año 2.012. Las subidas de los impuestos del alcohol y tabaco son las más aceptadas socialmente, de ahí que Montoro vuelva a subir estos impuestos por segunda vez en el año y medio que lleva de ministro. Y lo que nos queda