El coste por hora trabajada ha registrado una subida del 4,5% en el primer trimestre del año en tasa interanual, la mayor subida desde el segundo trimestre de 2019, como consecuencia del impacto del coronavirus.
En concreto, corresponde al menor número de horas trabajadas por la pandemia y las medidas restrictivas como la declaración del estado de alarma el 14 de marzo, según los datos provisionales del Índice de Coste Laboral Armonizado (ICLA) que publica el INE.
Por componentes, el coste salarial aumentó un 4,6% frente al primer trimestre de 2019, mientras que los otros costes crecieron un 4,2%. Así, el coste laboral, excluyendo pagos extraordinarios y atrasos, creció un 4,4% interanual en el primer trimestre de 2020.
Eliminando los efectos estacionales y de calendario, el coste laboral por hora trabajada avanzó un 3,5% en el primer trimestre frente al mismo periodo de 2019, tres décimas más que en el trimestre anterior y su mayor alza desde el último trimestre de 2009. Con este repunte, la tasa ya registra once trimestres de tasas positivas en la serie corregida.
En tasa trimestral, el coste laboral por hora trabajada aumentó un 1,2% en la serie corregida de efectos estacionales y de calendario, ampliando en tres décimas el avance trimestral de finales de 2019.
Sin tener en cuenta ambos efectos, el coste laboral se desplomó un 9,1% entre enero y marzo de este año por el menor peso de los pagos extraordinarios respecto al trimestre anterior.