La irrupción de los primeros influencers en la sociedad supuso un fuerte cambio en todos los aspectos. Personajes públicos que en un principio solo recomendaban productos se han convertido en protagonistas de anuncios y campañas publicitarias. Personajes que se han convertido en nuevos famosos y mueven cantidades ingentes de dinero con sus recomendaciones, ya sean pagadas o no pagadas.

Para muchos supuso un cambio en el mundo de la publicidad tal y como se conocía, con campañas menos agresivas y más naturales. Sin embargo, parece que los influencers quieren ir un paso más allá en el terreno económico y no solo cambiar el paradigma publicitario, sino también el bursátil.

Es una de las pioneras en este sector la que ha anunciado públicamente su intención de salir a bolsa. Chiara Ferragni, influencer italiana y una de las primeras en ver el potencial del negocio, ha optado por sacar su compañía a bolsa, como una estrategia de aumentar capital, de buscar nuevos accionistas y, además y no menos importante, de ofrecer la posibilidad a sus seguidores de participar de una forma más decisiva en su negocio.

Luis Gasca, experto en mercado de valores de la UDIMA, asegura que esta estrategia podría mejorar la interacción de la influencer con sus followers, que podrían participar de su negocio de forma directa, en forma de compra de acciones. Ferragni cuenta con 20 millones de seguidores y ha creado su propia marca, una marca que ahora pretende relanzar en bolsa.

“Para los inversores es llamativo invertir en una empresa como esta” -asegura el experto- “pero también lo es para sus seguidores. Si soy fan, me gustaría participar en sus negocios”. Para Gasca, es una “estrategia muy inteligente” de fidelizar sus clientes. “Es una forma de participar en sus sueños y negocios”, explica a ElPlural.com.

Tres empresas diferentes

Chiara Ferragni cuenta con tres empresas diferentes, dirigidas a diferentes negocios. Por un lado, Chiara Ferragni Collection, dedicada a moda y complementos; Hoot, dedicado a lo todo relacionado con su imagen, publicidad, marketing y gestión con las marcas y TBS Crew Srl, que gestiona directamente el blog que la influencer comenzó en 2009, The Blonde Salad.

Precisamente en 2009 Ferragni inició su carrera como influencer con este blog, mientras en paralelo estudiaba su carrera de Derecho. En 2013 dio un paso más en el negocio con la creación de Chiara Ferrangi Collection, su línea de moda, zapatos y complementos y, hace solo dos años, lanzó su línea de maquillaje junto a una de las grandes, Lancôme, con un gran éxito a nivel internacional.

A pesar de la crisis en el sector del lujo, la empresaria apenas ha sufrido el impacto de la pandemia por lo que, según Gasca, el hecho de elegir este momento para lanzar a bolsa su empresa no se debe a la crisis del coronavirus, sino a la decisión de Ferragni y el director general de su empresa de moda de rescindir el contrato de colaboración con su principal socio y proveedor de materiales, Pasquale Morgese, que cuenta con el 27,5% de Chiara Ferragni Collection.

Aunque no se conocen los detalles de la rescisión del contrato de colaboración, parece que la influencer quiere eliminar del negocio a su ya ex proveedor. Ante esto, ha optado por la opción que elegiría cualquier otra compañía de su tamaño, realizar una ampliación de capital. De esta forma, además de conseguir mayor financiación, también reduce el peso de Morgese en el accionariado. Dos pájaros de un tiro. 

Nivel de capitalización similar a Prada

A nivel económico, la capitalización de Ferragni en bolsa podría equipararse a Prada, según los expertos. En cuanto a facturación, la influencer alcanzó aproximadamente los 40 millones de euros en 2019 con sus tres empresas, especialmente con la compañía dedicada a moda y complementos y completada con una facturación menor, de 10 o 15 millones de euros, en el caso de sus otras dos compañías.

Esto alcanzaría un total de 120 millones de euros de capitalización, ya que se multiplicaría por cuatro el valor de facturación, como ocurre en el caso de Prada, la compañía con la que asimilan los expertos los negocios de la influencer. Además, Ferragni también ha tenido que diseñar un plan de negocio para los próximos cinco años, en los que detalla lo que hará su empresa y cuáles son sus previsiones. “Tiene que hacerlo como cualquier otra empresa. Si no la gente no compra acciones”, explica el experto de la UDIMA.

La influencer cuenta con un total de diez tiendas físicas en toda Europa, donde emplea a 80 trabajadores. En total, Ferragni tiene una plantilla contratada de 100 empleados entre sus tres empresas, incluyendo los sectores de marketing, publicidad o contabilidad. Las cifras son claras, solo 20 de ellos se dedican a los servicios más allá de tiendas físicas. Es decir, una veintena de personas que podrían calificarse de incluso asesores.

“No se puede anticipar si finalmente saldrá a bolsa”, avanza el experto bursátil, que considera que “ha lanzado un globo sonda”. En el caso de hacerlo, su irrupción no supondría competencia directa con otras marcas de moda y maquillaje, pero sí sería un punto de inflexión en el mundo de las marcas y de los influencers.

¿Cuál sería su mejor mercado?

Tampoco se puede anticipar cuál será el mercado elegido por la italiana para lanzar su marca ya que tendría que valorar y elegir el lugar dónde mejor potenciar su negocio, “como haría cualquier otra empresa”, explica Gasca. “¿Cuál sería su mejor mercado? ¿Europa? ¿Asia?”, se pregunta el experto, explicando que Prada, marca italiana de moda, cotiza actualmente en el mercado de Hong Kong.

La salida a bolsa de una compañía supone una forma de conseguir capital más fácilmente y menos costoso que a través de préstamos y avales, explica Gasca. “De materializarse, sería la primera piedra de los próximos influencers”, avanza el experto en mercados de valores.

Por otro lado, el director ejecutivo de VIZZ Agency, Mario Rigote, asegura que la noticia ha creado mucho revuelo. “Si desde un primer momento el objetivo era que el nombre saliera a la palestra, lo ha logrado”, asegura el directivo. Sin embargo, avanza que “el grado máximo que pudiera hacer un follower a un influencer en España sería donar dinero a través de plataformas”.

El experto de VIZZ justifica que la audiencia de influencers en España es menor de 25 de años, por lo que “no hay ni poder adquisitivo ni conocimiento para invertir en bolsa”. “Es difícil que sea un caso extrapolable” -explica Rigote- “No creo que las grandes audiencias estén preparadas para empezar este camino. No está entre las prioridades de los influencers”.

Ahora solo queda a esperar a ver si finalmente Chiara Ferragni sigue adelante con su salida a bolsa y cómo impactará eso en los mercados financieros, en sus negocios y en el mundo de los influencers. “Sería una gota más en el océano de las inversiones”, asegura Gasca, que no descarta que la italiana se convierta en pionera de un boom de salidas a bolsa de influencers y personajes públicos como las Kardashian o Rihanna.