La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, se ha mostrado en varias ocasiones firme defensora de la igualdad de género y ha alabado las ventajas que aporta la presencia de mujeres en los puestos directivos de las empresas. Una opinión que volvió a dejar clara durante la cumbre Bloomberg Equality Summit, en la que más de veinte ponentes intercambiaron experiencias y debatieron sobre la necesidad de mantener una fuerza laboral diversa e inclusiva, un aspecto vital para el éxito futuro de las empresas.

Durante una entrevista realizada con motivo de este encuentro, Botín reconoció la importancia de fijar objetivos para impulsar el talento femenino: “Cada día que pasa reconozco más que las cuotas suponen algo muy loable. Tal vez no para implementarlas ahora mismo, pero creo que debemos fijar objetivos, y de manera pública. Este sería el modo de establecer incentivos positivos que ayuden en esta dirección. Nosotros lo hemos hecho para que las mujeres ocupen puestos de liderazgo”.

La máxima ejecutiva del banco se mostró satisfecha de los avances que ha realizado la entidad en los últimos años, si bien reconoció que aún queda camino por recorrer. “Como ocurre con otras empresas, más del 50% de nuestra plantilla son mujeres. Las diferencias salariales son realmente pequeñas, casi nulas, aunque la brecha salarial de género todavía está en el 30%, debido a que aún hay pocas mujeres ocupando puestos de liderazgo. Lo hacemos bien al nivel de consejeros, donde hemos anunciado públicamente que queremos llegar al 50%. Hemos fijado el objetivo de alcanzar el 30% de mujeres en puestos de liderazgo para 2025. Sé que parecen unas cifras modestas, pero si queremos realizar promociones internas nos encontramos que a nivel de cargos intermedios en muchos países estos puestos están ocupados principalmente por hombres. Así que necesitamos tiempo, tenemos que buscar gente de fuera, pero es necesario adquirir un compromiso público al respecto”, destacó. Y añadió que “las mujeres hemos tenido una discriminación real durante muchos años, por lo que no será malo incluso si vamos al otro lado por un tiempo".

Santander es una de las compañías que más puede presumir de impulsar la paridad entre sus profesionales: no sólo es la única entidad española que cuenta con una presidenta al frente, sino que también es uno de los representantes del Ibex 35 con mayor presencia femenina en el consejo de administración (5 de 15, lo que supone un 33%). En España, el promedio de mujeres miembros de consejos de administración es del 19%, frente al 28% de media en la Unión Europea.

El banco también tiene tres mujeres (de ocho puestos) en el consejo asesor internacional y son mayoritarias en el conjunto de los empleados del banco, con un peso del 55% de un equipo de más de 200.000 personas. Sin embargo, actualmente sólo ocupan un 20% de los 2.000 primeros puestos directivos de la entidad. Un porcentaje que Ana Botín ha calificado como “insuficiente”. “Queremos ser justos y ayudar a las mujeres a tener oportunidades. Es algo que nos interesa a las empresas. Si hombres y mujeres somos igual de listos, deberíamos estar al 50%", señaló con motivo de la presentación de los resultados del grupo en 2017”.

Son muchos los estudios que avalan las ventajas objetivas que aporta la presencia de mujeres en los puestos directivos de las empresas y su impacto positivo en las cuentas de resultados. Según un informe del Instituto Peterson para la Economía Internacional y el Centro de Estudios YE, las compañías que apuestan por el liderazgo femenino aumentan hasta seis puntos porcentuales sus beneficios netos. También un estudio de McKinsey concluye que las empresas que se encuentran en el primer cuartil para la diversidad de género en sus políticas ejecutivas tienen un 15% más de probabilidades de obtener una rentabilidad superior a la media que las empresas del cuarto cuartil.

Para Ana Botín, “además de talento, las mujeres aportan al negocio competencias complementarias a las de los hombres: mejor comunicación interpersonal, cooperación, pensamiento horizontal y capacidad de escuchar de verdad. También mayor empatía y capacidad de priorizar. Ya en 2008 existían estudios que mostraban que, en los grupos de trabajo con una sana mezcla de mujeres y hombres, había mejor comunicación, estaban más abiertos a nuevas ideas y la confianza entre los miembros del grupo era mayor. Y el resultado era más eficiencia, mejor rendimiento. Todos ganamos”.

Los esfuerzos del banco por promover el talento femenino, tanto interna como externamente, están dando frutos. Así lo reconoce el índice Bloomberg Gender-Equality, integrado por 230 compañías que operan en diez sectores de actividad (comunicaciones, productos básicos de consumo, energía, finanzas y tecnología, entre otros) de 36 países. Santander ha revalidado este año el primer puesto tanto en el índice global como en el que evalúa a las entidades financieras. En la edición de 2019, su puntuación total ha aumentado hasta 95,3 puntos sobre 100, frente a los 93,4 puntos obtenidos en 2018.

Además, la entidad cuenta con la certificacion EFR de Aenor, un sello de conciliación e igualdad que reconoce a las empresas que destacan por la aplicación de políticas de igualdad de trato y oportunidades entre sus trabajadores, y de equilibrio entre vida profesional y familiar.

Iniciativas para impulsar el talento femenino

El grupo financiero ha definido pautas para asegurar una fuerza laboral diversificada en todo el grupo. Entre ellas, mejorar la proporción hombre/mujer en los procesos de selección para posiciones de liderazgo; aumentar el porcentaje de mujeres a la hora de planificar la sucesión; promover su crecimiento a través de programas de mentoría y desarrollo multifuncionales; o asegurar la meritocracia en todos los niveles a través de una herramienta común (MyContribution) que mide el impacto de cada empleado en el grupo.

El compromiso del banco con la igualdad se concreta, además, en iniciativas externas, como el lanzamiento en España del primer fondo de inversión que invierte en empresas que promueven la igualdad (Santander Equality Acciones); los premios a la mejor iniciativa impulsada por mujeres (Woman Explorer Adward); la organización de encuentros para reforzar el liderazgo de las mujeres que quieren crecer en el ámbito profesional (Mujeres con S) o las acciones de voluntariado para combatir la violencia de género (De Mujer a Mujer).