Según publica un estudio de la Fundación Transforma España y la consultora Estudio de Comunicación, el 75% de los empleados están dispuestos a prolongar la vida laboral. No obstante, esta respuesta categórica está condicionada a percibir un mayor reconocimiento y oportunidades de reciclaje profesional. El informe establece que a los 50 años una persona es considerada “persona mayor”. Sin embargo, el 94% de los directivos que han participado en el estudio -1.500- consideran que es muy importante el rol que desempeñan estos empleados en el día a día de la empresa ya que sus cualidades y talento son un factor que, aunque no dependa de la edad, la cifra suma. Al fin y al cabo, la experiencia es un grado ¿no?

Desde luego hay una serie de características de diferencian a los empleados más mayores con las recientes y jóvenes incorporaciones. Se trata de una serie de valores como la lealtad, compresión de la cultura de la organización, experiencia y autocontrol de las que las nuevas generaciones, en principio, carecen.

Sin embargo, el 43% de los empleados sénior se considera excluido en ciertos aspectos como, por ejemplo, la promoción de la empresa. No obstante, esta sensación de abandono no cambia el hecho de que el 89% de los empleados 'mayores' se sienta comprometidos con la compañía para la que trabajan. Además, hay un 79% dispuesto a realizar esfuerzos adicionales. Una voluntad que entre las generaciones más jóvenes es difícil de encontrar.

Tan solo el 25% de los empleados encuestados no desea prolongar su vida laboral. Sin embargo, si las empresas les aseguraran que su labor será realmente valorada; tengan oportunidades para aprender nuevas técnicas; flexibilidad horaria y que su misión principal fuera aconsejar y ayudar a compañeros jóvenes, la decisión de este porcentaje de trabajadores cambiaría. De hecho, los grupos en los que cooperan los empleados séniores y jóvenes son un 73% más eficaces que los grupos homogéneos.

“La sostenibilidad de las pensiones exige una reforma urgente que pasa, entre otras medidas, por la necesidad de conservar y retener el talento de los séniores. Los trabajadores deben tener la oportunidad de prolongar la vida laboral si así lo desean, más allá de la edad legal de jubilación. Por ello no estamos de acuerdo con las cláusulas de jubilación forzosa que rigen en algunos convenios” señala Manuel Pérez-Sala, presidente del Círculo de Empresarios. Algunas de las empresas que han participado en este estudio son, por ejemplo, Amadeus, Grupo Dynasol o McDonald’s.