Un tribunal de Moscú ha prohibido las redes sociales Facebook e Instagram después de considerar que su empresa matriz, Meta, es "extremista", admitiendo de esta forma una petición de la Fiscalía General, que reclamaba también la aplicación de la orden con efectos "inmediatos".

La Fiscalía abogaba por tomar medidas contra la compañía estadounidense por no eliminar contenido donde se alentaba supuestamente a la violencia, si bien la Justicia ha dejado al margen del señalamiento al servicio de mensajería instantánea Whatsapp y a los directivos y usuarios de las redes ahora prohibidas, según la agencia Interfax.

Tanto Facebook como Instagram ya están prohibidas en Rusia, desde el 4 y el 14 de marzo, respectivamente, después de que las autoridades hayan endurecido la presión sobre los medios y en Internet para tratar de controlar la información sobre la ofensiva militar lanzada en Ucrania.

Unos 3,5 millones de refugiados han salido ya de Ucrania

Unos 3,5 millones de personas han salido de Ucrania desde que Rusia lanzó su invasión el 24 de febrero, según datos del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), que estima que en más de diez millones quienes han tenido que abandonar sus hogares en menos de cuatro semanas.

Polonia ha recibido ya a más de dos millones de refugiados, si bien no está claro cuántos se han quedado en territorio polaco. Rumanía acumula más de 535.000 llegadas, frente a las 365.000 de Moldavia, las 312.000 de Hungría y las 250.000 de Eslovaquia.

ACNUR también tiene registrados casi 232.000 refugiados en Rusia, destino en gran medida de quienes viven en la zona este de Ucrania, en áreas controladas por los rebeldes separatistas. Además, unas 3.700 personas han cruzado la frontera hacia Bielorrusia, país aliado de Moscú en este conflicto.

"Entre las responsabilidades de quienes libran guerras en todo el mundo, está el sufrimiento infligido a los civiles que se ven obligados a huir de sus hogares", lamentó el domingo el jefe de ACNUR, Filippo Grandi, al anunciar que se había superado el umbral de diez millones de refugiados y desplazados internos.