Rocío Monasterio ha visitado este viernes Vallecas entre grandes medidas de seguridad. La líder de Vox Madrid convocaba a los ciudadanos en la conocida como 'Plaza Vieja' de Puente de Vallecas para protestar por la seguridad en el barrio.
Aunque en los mensajes difundidos por la formación explicaban que convocaban a los vecinos del barrio, ElPlural.com ha confirmado con la Delegación del Gobierno que la protesta no ha sido notificada. Tampoco las principales asociaciones de Puente de Vallecas, con las que se ha puesto en contacto este diario, saben de dónde sale la convocatoria, a pesar de que están al tanto de todas las acciones vecinales que se desarrollan a lo largo y ancho del distrito.
Para evitar las imágenes que se produjeron en la 'Plaza Roja' de Vallecas, cuando el líder de Vox, Santiago Abascal, rebasó el cordón policial y se enfrentó a unas personas que se manifestaban contra su presencia en un mitin celebrado en el barrio, tal y como demostraba la Policía, se ha desplegado un amplio dispositivo de seguridad en la zona para evitar incidentes.
Sin embargo, a las 20 horas, Monasterio abandonaba Vallecas entre gritos de los vecinos de una de las avenidas cercanas a la plaza, que protestaban contra la presidenta de Vox Madrid. "Fuera de Vallecas" y "fuera fascistas de nuestros barrios", eran los cánticos que se podían escuchar a su salida de la concentración.
Además, por motivos de seguridad, la Policía Nacional ha tenido que interrumpir el tráfico en la avenida de Montigueldo durante unos minutos para que Monasterio pudiera abandonar con normalidad la zona.
Sin embargo, haber elegido esa zona para abandonar la concentración ha provocado que por su cercanía a la avenida de la Albufera, arteria que cruza Vallecas de Este a Oeste y la cercanía a la M-30, ha provocado el caos circulatorio con grandes atascos en las calles durante unos minutos.
El 'Otoño caliente' de Vox en las calles
Vox afronta este nuevo curso con una agenda de movilizaciones en la calle con las que hacer oposición al Gobierno de Pedro Sánchez y una gran convención en Madrid los días 9 y 10 de octubre en la que pretende "mostrar músculo" y desgranar las que serán sus principales batallas políticas e ideológicas durante los próximos meses.
Este mismo sábado, el líder del partido, Santiago Abascal, liderará en Mondragón (Guipúzcoa) una contramanifestación al anunciado recibimiento al terrorista Henri Parot, en prisión por 39 asesinatos.
Junto a Abascal, a la concentración acudirá una amplia delegación de Vox para arropar a su diputado y expresidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) Francisco José Alcaraz, cuyo hermano y dos sobrinas murieron en el atentado contra la casa cuartel de Zaragoza en 1987. Este es uno de los ataques por los que Parot fue condenado, además de otros tantos en Madrid, Granada o Irún.
Ya el domingo, Vox ha animado a los ciudadanos a sumarse a la concentración convocada por el sindicato Solidaridad en Madrid en rechazo a la subida del precio de la luz. A esta protesta acudirá también Abascal y gran parte de la cúpula del partido.
Sin embargo, el mayor acto que Vox tiene programado se celebrará el fin de semana del 9 y 10 de octubre, cuando Vox ha organizado una gran feria en uno de los pabellones de Ifema con aforo para miles de personas.
Su objetivo es celebrar algo parecido a un congreso de un partido -aunque sin renovación de órganos ni votaciones- y presentar lo que denomina 'Agenda España', el documento marco que recogerá sus principales líneas de acción política para los próximos meses.
Pero además, quiere que sea un espacio lúdico en el que sus dirigentes y simpatizantes puedan conocerse y disfrutar de la música, gastronomía u oferta cultural de todos los puntos de España. Para ello, estarán representadas todas las delegaciones provinciales de Vox y se celebrarán actos culturales representativos de cada una de ellas.