Hoy miércoles,  se va votar en el Parlamento andaluz una proposición de ley trascendental para el futuro de Doñana. La Junta se enfrentará contra el Gobierno central y la Unión Europea al dar el primer paso para ampliar los regadíos de Doñana y legalizar 800 hectáreas de invernaderos ilegales de fresas y frutos rojos en el entorno al Parque Nacional, que ya se halla en situación crítica. Una zona de regadío que funciona al margen de la ley y que ahora, PP y Vox quieren dar base legal.

Paralelamente, se ha reunido de manera extraordinaria el pleno del Consejo de Participación de Doñana para analizar dicha proposición de ley. Eloy Revilla, director de la Estación Biológica de Doñana – CSIC, ha presentado algunos datos para ilustrar la situación crítica en la que se encuentra Doñana y ha ofrecido algunas propuestas para frenar su deterioro. También ha informado de la repercusión sobre el estado de conservación del acuífero, del que dependen numerosas especies y hábitats catalogados como prioritarios por la legislación andaluza, española y comunitaria.

España condenada por la UE

Revilla ha recordado que "España está condenada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea por incumplir sus obligaciones derivadas de la Directiva Marco del Agua y de la Directiva Hábitat". Se la condena por no haber tenido en cuenta la extracción ilegal de agua para el cultivo y las extracciones de agua para abastecimiento urbano en la estimación de las extracciones totales de agua subterránea de la comarca de Doñana y por no haber previsto ninguna medida para evitar la alteración ocasionada por las extracciones de agua subterránea sobre los tipos de hábitats catalogados como prioritarios.

Efectos de la pérdida de las lagunas temporales sobre la biodiversidad

El director de la Estación Biológica ha presentado algunos de los datos de su labor. Informes que están arrojando resultados desoladores, tanto en relación con el estado de las lagunas y otros hábitats del espacio natural como con la biodiversidad que depende de ellos.

El 59% de las lagunas de mayor tamaño no se inundan desde 2013

En el último estudio publicado en la revista científica Science of The Total Environment, los datos demuestran que el deterioro del sistema de lagunas de Doñana es generalizado. Se ha constatado que el 59% de las lagunas de mayor tamaño de Doñana no se han inundado al menos desde 2013. Estos cambios, están significativamente relacionados con la temperatura y la precipitación de cada año, pero también con la extensión de áreas cultivadas, la superficie construida en Matalascañas, la distancia a las estaciones de bombeo de la urbanización y el funcionamiento del campo de golf. Según los datos, el 80% de estas lagunas se secaron antes de lo esperado por la precipitación y la temperatura observadas y el 84% tuvo un área de inundación menor de lo que se había previsto en función de los mismos parámetros, lo que indica que la actividad humana está alterando el equilibrio natural de las lagunas.

Las tres lagunas que funcionaban como permanentes, es decir, aquellas que no se secaban en verano como sí lo hace la gran mayoría de las lagunas de Doñana, han dejado de serlo. Por ejemplo, la laguna de El Sopetón y la Dulce, que solo se secaban ocasionalmente, ahora se secan con frecuencia. La situación de Santa Olalla, la mayor laguna permanente de Doñana, ha sido extrema en el verano de 2022, en la que se secó completamente. "Esta laguna se secó parcialmente también en 1983 y 1995, en ambas ocasiones, tras cuatro años seguidos de sequía”.

Daños en la fauna y la vegetación

Toda esta situación está teniendo repercusiones sobre la fauna y la vegetación singular de Doñana. Por ejemplo, al acortarse el periodo de inundación de las lagunas temporales, los anfibios han perdido gran parte de sus lugares de reproducción. Según los datos, la riqueza de especies de anfibios se ha reducido de una media de 4,3 especies por km2 en 2003 a 2,5 por km2 en 2021. También es preocupante la situación de las dos especies de galápagos autóctonas de la Península Ibérica, ambas incluidas en las listas rojas europeas, así como la de otros grupos como el de las libélulas y los caballitos del diablo. En 1959 se describieron 43 especies de estas últimas, mientras que en la última década tan sólo se observaron 26 especies y el año pasado, tan solo 12. Otros grupos gravemente amenazados por la pérdida de hábitats acuáticos es el de los peces, del que Doñana conserva especies amenazadas, como la colmejilla o la anguila. Por ejemplo, la desecación total de Santa Olalla en 2022, supuso la muerte de las anguilas que quedaban en esa última laguna permanente. Y la situación crítica de estos hábitats no sólo está afectando a las especies animales. También está teniendo repercusiones negativas para la conservación de plantas acuáticas, especialmente las asociadas a lagunas con un hidroperiodo largo, algunas de las cuales tienen una distribución muy restringida y están amenazadas.

Asociado al decaimiento y pérdida del monte negro dentro del Espacio Natural, se está produciendo la defoliación y muerte de numerosos árboles, incluyendo alcornoques multicentenarios, lo cual es un buen indicador de la excepcionalidad de la situación actual. Desde la última revisión realizada en 2010, han muerto el 8,3% de los alcornoques y un 10% se encuentra en muy mal estado.

El cambio climático está cambiando los patrones de precipitación y estos cambios se van a intensificar en el futuro e indican una clara disminución del agua disponible. Sin embargo, la demanda del agua en la comarca de Doñana no ha dejado de aumentar.

Críticas a la proposición de ley

En relación a la proposición de ley presentada en el Parlamento de Andalucía, Eloy Revilla ha querido dejar clara su opinión: "La explotación actual del acuífero no es sostenible. Se está extrayendo más recurso del que se regenera anualmente mediante la recarga por precipitación, que es variable y decreciente, por lo que se está agotando este recurso natural".

Un "claro fallo de gobernanza"

Además, ha afirmado que la proliferación descontrolada de cultivos de regadío sin las correspondientes autorizaciones ha sido causada por un "claro fallo de gobernanza" por parte de las administraciones competentes. Para él, hay una "clara falta de voluntad política" a la hora de solucionar el problema. "Esta inacción ejecutiva es la que nos ha llevado al insostenible punto crítico en el que se encuentra Doñana", ha asegurado.

La necesidad de proveer de agua a las explotaciones que carecen de concesiones, dificulta aún más la solución urgente del problema. "La situación actual de Doñana es crítica y no permite esperar otra década a que se tomen las decisiones que ajusten la demanda de agua a la disponibilidad", ha afirmado. "Si así se hiciera, estaríamos imponiendo, contra la legalidad vigente, la pérdida completa de los sistemas de lagunas temporales y otros hábitats dependientes del acuífero. El problema al que se enfrenta Doñana es muy complejo y también lo tendrá que ser su solución.

Propuestas para frenar el deterioro de Doñana

El director de la Estación Biológica de Doñana ha ofrecido algunas pautas para evitar que continúe la degradación del espacio natural, catalogado como Patrimonio de la Humanidad. Entre sus propuestas, está la de reducir de forma urgente la cantidad total de agua que se extrae del acuífero hasta unos niveles que permitan el inicio de su recuperación. Sólo así, su explotación podrá ser sostenible, tanto a corto como a medio y largo plazo. También está la de actualizar el sistema de evaluación del estado del acuífero y realizar evaluaciones anuales de la disponibilidad del agua del acuífero para definir las cantidades máximas que se pueden extraer del mismo.

Por otra parte, Eloy Revilla apuesta por establecer con urgencia la Comisión de trabajo Doñana 2030 e intensificar el seguimiento de los sistemas naturales y las especies afectadas por el cambio climático y la sobreexplotación de los recursos así como hacer análisis socioeconómicos para poder desarrollar una agricultura sostenible en la comarca, así como establecer medidas para diversificar la actividad económica.

Patrimonio universal de toda la humanidad

"De nuestras decisiones depende el futuro de Doñana y su comarca, que, les recuerdo, no solo es un valor local, o regional, sino que se trata de un patrimonio universal de toda la humanidad. Ustedes han de escoger cómo quieren pasar a la historia", ha concluido Eloy Revilla en su intervención.