El PSOE de Castilla-La Mancha ha retado este jueves en el pleno de las Cortes regionales a aceptar su petición de reprobar al ministro de Consumo, Alberto Garzón, por sus declaraciones sobre las macrogranjas si el líder 'popular', Paco Núñez, dimite por su actitud durante años sobre este asunto.

El Parlamento autonómico ha debatido, por un lado, la moratoria para la instalación de grandes explotaciones de porcino hasta el 31 de diciembre de 2024 como enmienda del PSOE a la Ley de acompañamiento de los presupuestos y, por otro lado, sobre las declaraciones de Garzón.

En relación a la moratoria, en el primer punto del orden del día, la portavoz del grupo socialista, Ana Isabel Abengózar, ha acusado a los dos grupos de la oposición de "sumarse al carro" por la polémica a raíz de las palabras del titular de Consumo pero les ha reprochado que en la comisión en la que se debatieron las enmiendas se abstuvieron y no propusieron texto alternativo alguno.

El propósito de esta moratoria, ha dicho, es "no atacar a nadie sobre todo" así como "velar y ayudar al futuro del sector primario del campo y de los pueblos" haciendo una ordenación del sector" ante, ha admitido, el crecimiento exponencial de autorizaciones para estas instalaciones.

Asimismo, ha lamentado que el PP, "con tal de desgastar al Gobierno regional", ha alimentado esta polémica, al igual que ha sostenido el presidente del grupo socialista, Fernando Mora, durante el debate general sobre las declaraciones del ministro de Consumo, además de que también ha achacado dicha polémica a las próximas elecciones en Castilla y León.

Mora ha subrayado que el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, "se ha pronunciado claramente sobre las inoportunas y poco meditadas declaraciones de Garzón" y ha replicado al PP que se implica en este debate "porque se lo han mandado desde Génova", al tiempo que ha lanzado el reto de que dimita Núñez porque su actitud es "mucho más grave que lo que ha hecho o dicho el ministro".

Con todo, en su propuesta de resolución a este debate el PSOE no ha hecho referencia alguna a las declaraciones de Garzón sino que se ha limitado a que las Cortes regionales apoyen al sector cárnico y ganadero, tanto extensivo como intensivo, a que se impulse una ganadería sostenible, a que apoyen la posición de García-Page y a que se refuercen los planes de control de cumplimiento de la normativa.

Por su parte, el diputado regional del PP Miguel Ángel Rodríguez ha señalado sobre la moratoria de las macrogranjas que se ha hecho "de espaldas al sector, genera inseguridad jurídica y condena a una actividad económica que genera empleo y cumple rigurosamente con una normativa medioambiental muy exigente y de sanidad y bienestar social".

Rodríguez ha acusado a los socialistas de "criminalizar" al sector productivo "para hacer seguidismo de Garzón" y les instado incluso a retirar la enmienda sobre la moratoria.

La postura de PP y Cs

También la portavoz del grupo popular, Lola Merino, les ha atribuido a los socialistas que "han comprado las mentiras ideológicas y malintencionadas de la izquierda más radical", unas declaraciones de Garzón "graves e insultantes que son un ataque en toda regla a los ganaderos y merecen la reprobación", ha remarcado.

Por ello, ha considerado que este jueves no cabe otra cosa que aprobar la petición de cese "fulminante" de un ministro que, según Merino, "no tiene ni la más puñetera idea de lo que tiene que defender", y le ha espetado a los socialistas que "todo lo demás que guarreen, traigan y lleven, es cinismo y postureo".

La propuesta de resolución del PP recoge que las Cortes reprueben las manifestaciones del ministro y que insten al Gobierno regional y a García-Page a solicitar al presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, el cese inmediato de Garzón.

En la misma línea va la propuesta de resolución de Cs, en la que piden que el Parlamento castellanomanchego repruebe las declaraciones de Garzón en las que ataca a la industria ganadera y pidan el cese como ministro por no defender los intereses del país.

Durante su intervención, la diputada regional de la formación naranja Elena Jaime ha tildado a Garzón de "gran demagogo y populista" y ha dicho que él es el problema y "el pacto casi diabólico" para sostener a Sánchez, motivo por el que ha considerado que el Ejecutivo central no puede echar a Garzón, por lo que "le sale gratis" atacar a los ganaderos.

Además, ha afirmado que "no se puede permitir que un ministro ataque así a un sector español y que este siga tragando palos de los que lo deberían defender a capa y espada", ha sentenciado.