"Decepcionantes". Con esta palabra puede resumirse la opinión que le merece a la Asociación en Defensa de la Sanidad Pública de Madrid las medidas anunciadas este viernes por el Gobierno regional para controlar la pandemia de coronavirus. El pasado 1 de agosto, su presidente, Marciano Sánchez Bayle, ya advertía a través de ELPLURAL.COM de la gravedad de la situación sanitaria en esta comunidad autónoma. "Estamos en peligro", subrayaba.
Sin embargo, el ejecutivo regional optó por eludir la adopción de medidas anticipadas e ignoró las voces que alertaban de la necesidad de aumentar el número de rastreadores y reforzar el sistema. Así hasta llegar a un punto crítico que ahora trata de abordar con parches que no parece que puedan mejorar demasiado el problema.
Las normas de restricción de la movilidad aunciadas por Isabel Díaz Ayuso, junto al vicepresidente Ignacio Aguado y el Consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, son "muy leves", lamenta Sánchez Bayle, que insiste, además, en que llegan "muy tarde". "Si esto se hubiese hecho a mediados de agosto tendría una justificación, pero ahora parece difícil de entender. No se dan cuenta de que si las cosas no se hacen yendo por delante, todo empeora. El problema en Madrid es que la actitud ha sido siempre la de ir por detrás de los hechos. Se toman medidas cuando ya la cosa está muy mal", precisa.
Pocos rastreadores
Sánchez Bayle muestra su indigación con el anuncio sobre el número de rastreadores. "Tienen 800, tal y como han reconocido este viernes, lo cual es increíble, y ahora dicen que van a llegar hasta 1.200", una cantidad irrisoria para Madrid, donde tendría que haber 2.600. A esto hay que añadir que cuando ya hay transmisión comunitaria el papel del rastreador pierde eficacia.
Las medidas que faltan
Del mismo modo, el presidente de la Asociación en Defensa de la Sanidad Pública lamenta que el ejecutivo regional ni se plantee otras medidas que considera "centrales" para mejorar la situación de la pandemia en esta comunidad. La primera de ellas tienen que ver con la Atención Primaria. "La situación sigue siendo escalofriante", afirma. "El Consejero ha dicho que no hay ningún centro de salud cerrado y no es cierto. Hay al menos seis", advierte, subrayando que "tener abiertas un centro no implica que sus puertas estén abiertas con dos administrativos y dos miembros del personal de enfermería dentro".
Otro de los puntos que destaca y que echa en falta es la necesidad de "reforzar con personal el funcionamiento de los laboratorios que están haciendo las determinaciones de PCR". "Hay demoras de entre 6 y 8 días para los resultados de estas pruebas y esto no puede ser", indica. "En ese tiempo los contactos de los posibles positivos siguen circulando y contaminando".
Sobre el anuncio de la realización "en poco tiempo" de "un millón de pruebas de antígenos", Sánchez Bayle se muestra convencido de la intención del ejecutivo de Díaz Ayuso es la de "regalárselo a alguna empresa privada". "Harán un montaje del tipo del que hicieron con los profesores, con colas kilométricas que favorecen más los contagios", recuerda. Ese tipo de pruebas, además, "tienen bastante variabilidad y ninguna autoridad sanitaria mundial los indica para hacer diagnósticos poblacionales".
La tercera clave tiene que ver con los transportes. "No con el AVE y los aeropuertos", precisa, puntualizando irónico con Ayuso que "los vecinos de Usera o Puente de Vallecas frecuentan poco Barajas". Sánchez Bayle incide en la necesidad de reforzar los autobuses urbanos e interurbanos y el metro, lugares que se utilizan todos los días, donde hay hacinamiento y se incrementa el riesgo de contagio.
En la Asociación en defensa de la Sanidad Pública lo tienen claro: "Todo lo que hacen son cosas que no están indicadas para la situación, y eso lleva a que esta se agrave".
