Los sindicatos CCOO, UGT y CGT han llamado a la huelga a los trabajadores de Canal de Isabel II después de que esta se lleve la atención telefónica de Madrid a Valladolid y comprometa el empleo de 154 familias. Esta convocatoria, junto a la de una concentración frente al edificio de la empresa pública, se produce solo días después de conocer el resultado de la nueva adjudicación de la compañía de este servicio, que supondrá su traslado hasta la capital castellanoleonesa y pondrá contra las cuerdas a cientos de trabajadores.

Peores condiciones para los trabajadores

A través de un comunicado publicado el pasado viernes, UGT ha criticado que la empresa que acomete la gestión del ciclo integral del agua de la Comunidad de Madrid permita a una de las dos empresas adjudicatarias prestar el servicio desde Valladolid, comprometiendo así la continuidad de la actual plantilla. UGT Madrid explica que, hasta ahora, esta atención telefónica para los usuarios estaba en manos de una compañía, GSS Venture, pero a partir de sacar a concurso este departamento se van a repartir en dos: Servinform y Telecyl-Madison.

Según el sindicato, con esta decisión se "divide en dos lotes un servicio en el que todas las personas trabajadoras tienen las mismas funciones, sin entrar a determinar en los pliegos por qué y cómo se va a producir esa división", pero "lo más preocupante" repara en la influencia que va a tener en todos los empleados. "Se determina que en cada lote prestaran servicios 50 personas, cuando la plantilla actual es de 154 trabajadores y trabajadoras, por lo que, de inicio, el Canal ya se desentiende del futuro laboral de un tercio", afirman.

"No está exigiendo a las empresas entrantes que subroguen a las personas trabajadoras, abriendo la puerta a que se impongan peores condiciones a los trabajadores y trabajadoras para realizar el mismo trabajo", afirman en el texto. "Más chocante todavía es" -dicen- que Telecyl-Madison, además, pretende llevarse este servicio hasta Valladolid, aunque cuenta con sede en la capital, por lo que los trabajadores que puedan subrogarse a la nueva adjudicataria "van a tener serias dificultades para continuar en sus empleos".

Sin empleo, indemnización ni paro

Por eso, UGT ha alertado de que el servicio de atención telefónica se puede ver "seriamente afectado" debido a dos factores: la reducción de personal y el cierre de prácticamente todas las oficinas presenciales. "Esto, que va a suponer un incrementando significativo del número de llamadas telefónicas, se va a traducir en demoras y peor servicio al cliente", aseguran, antes de criticar el intento de GSS Venture, la actual adjudicataria, de "no asumir la carga de despidos e indemnizaciones".

"La plantilla se podría quedar sin empleo, sin indemnización y sin prestaciones de desempleo. Un grave despropósito e irresponsabilidad por parte de la dirección del Canal de Isabel II", insisten desde el sindicato, que anuncia movilizaciones "ante la sinrazón del Canal y de las empresas, que miran para otro lado, que se desentienden del empleo de los trabajadores y trabajadoras y sabiendo que el servicio se va a ver afectado enormemente perjudicando de este modo a la ciudadanía de Madrid".

CCOO, UGT y CGT llaman a la huelga a los trabajadores del Canal de Isabel II

CCOO, UGT y CGT llaman a la huelga a los trabajadores del Canal de Isabel II

Precisamente este -que 154 personas teleoperadoras se pueden quedar sin trabajo, ni indeminación ni paro- es el argumento que esgrimen para convocar una huelga de 24 horas y una concentración el próximo 12 de septiembre frente a la sede del servicio público -en la calle Santa Engracia, número 125, de Madrid- de 12:00 a 13:00 de la tarde bajo el lema "El Canal de Isabel II se lava las manos".

Canal de Isabel II lo niega

Ante esto, fuentes de la empresa pública afirman que "limitar el ámbito geográfico de las sedes de las empresas a Madrid supondría la vulneración del principio de concurrencia que rige en la contratación pública" y aseguran que "los trabajadores de GSS que así lo deseen formarán parte del proceso de la selección de plantilla del adjudicatario entrante, que deberá configurar su plantilla con un 90% de ellos".

"Es un derecho y decisión exclusiva de los trabajadores incorporarse o no a las nuevas empresas, y una obligación por parte de estas ofrecerles esta posibilidad", indican. En cuanto a los dos lotes de trabajadores, la compañía niega que se desentienda del futuro laboral de un tercio de la plantilla, tal y como denuncian desde UGT, y aclaran que la cifra de 50 empleados es "un mínimo" y no se fija un máximo. "Las ofertas presentadas por los adjudicatarios superan los 150 teleoperadores mencionados", aseguran.