Durante este verano, miles de madrileños del sur de la región que continúan trabajando en agosto y dependen del transporte público se han visto afectados por las inexplicables decisiones de Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez-Almeida. Tras haberles cerrado el intercambiador de Príncipe Pío, un espacio clave para la circulación de gran parte de la Comunidad de Madrid, no se les ha ofrecido ninguna alternativa digna con la que puedan combatir las altas temperaturas que han azotado a la mayoría del país este verano. Ignacio Benito, portavoz de Movilidad del Grupo Municipal Socialista, ha sido contundente al señalar que "hay motivos políticos evidentes" detrás de esta situación, que perjudica al transporte público y favorece al vehículo privado.
“Antes de las obras, la A-5 contaba con tres carriles para vehículos y uno exclusivo para autobuses que llegaban hasta Príncipe Pío. Con la reorganización, el Ayuntamiento ha reducido a dos carriles por sentido y ha eliminado por completo el carril bus. Es decir, pasamos de 3+1 a 2+0”, explica el edil socialista a ElPlural.com.
El resultado, añade Benito, es que se está condenando a todos los usuarios, es decir, a “miles y miles de personas” que accedían a la capital desde la zona suroeste, y que como consecuencia se han visto obligados a quedarse en Cuatro Vientos, en una zona sin condiciones mínimas, que se encuentra a plena luz del sol y sin ninguna sombra con la que resguardarse.
Desde el PSOE aseguran estar recibiendo numerosas quejas por parte de ciudadanos y trabajadores del intercambiador afectados por esta situación. Y es que usuarios que se están quedando “en la nada” y se sienten completamente "abandonados", continúan haciendo un llamamiento, solicitando la apertura del intercambiador para los autobuses.
La imagen del intercambiador, según describe Benito, habla por sí sola: “Ahora mismo, si ves el intercambiador, se trata de dos pisos completamente fantasmas”. Esta infrautilización está costando unos 25 millones de euros, que sigue siendo pagado con dinero público mientras permanece vacío.
Benito denuncia que la política del Ayuntamiento y la Comunidad consiste en impedir que los autobuses lleguen al centro de la ciudad, sin que haya ninguna limitación para los vehículos privados. “Han decidido que los autobuses no deben llegar al centro de la ciudad y no hay ninguna limitación para que los vehículos privados lleguen. Además, nos está costando dinero. Es un sinsentido”, lamenta.
Esperando soluciones bajo el calor
La situación se ha agravado durante las altas temperaturas en el mes de agosto que han azotado a la Comunidad de Madrid. Benito critica duramente que el Gobierno municipal no se haya preocupado por los viajeros “hasta el último día de la ola de calor más larga que se recuerda”. Mientras tanto, los usuarios del transporte público han tenido que soportar estas temperaturas en zonas sin sombra ni infraestructuras adecuadas.
Frente a esta situación, el PSOE propone una solución clara: permitir de nuevo la entrada de los autobuses interurbanos hasta el intercambiador de Príncipe Pío. “No solo mejoraríamos la calidad de vida de los madrileños, sino que también daríamos uso y sentido a un espacio que cuesta 25 millones de euros de dinero público”, insisten.
Según declara en exclusiva Benito a ElPlural.com, la clave está en una cláusula incluida en el contrato con la concesionaria del intercambiador. Por cada viajero que no utiliza estas instalaciones, el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid deben pagar 31 céntimos a la empresa. “No se está haciendo una obra o pagando un mantenimiento. Es simplemente una compensación por dejar el intercambiador vacío, que se tiene que continuar pagando como si esos viajeros llegaran de verdad”, asegura el concejal.
La denuncia se enmarca en una estrategia más amplia del PSOE para evidenciar lo que consideran una falta de compromiso de Almeida y Ayuso con la movilidad sostenible. “Les están diciendo a los madrileños que no merece la pena dejar el coche aparcado. Madrid es hoy la ciudad al revés”, concluye Ignacio Benito.