La magistrada que instruye el caso por las muertes provocadas por la DANA en la Comunitat Valenciana ha vuelto a rechazar la citación como testigo de la periodista Maribel Vilaplana. En una de las siete resoluciones firmadas este lunes, la jueza recuerda que el president de la Generalitat, Carlos Mazón, es aforado, lo que impide avanzar por esa vía sin una tramitación especial. Vilaplana compartió mesa con Mazón el 29 de octubre en el restaurante El Ventorro, y su nombre había sido propuesto por una de las acusaciones personadas.

La solicitud, según indica el auto, “estaría relacionada con la localización y la actuación del President de la Generalitat durante dicho día”. La instructora hace alusión a las declaraciones previas de la exconsellera Salomé Pradas, quien mencionó sus comunicaciones con Mazón mientras testificaba. Sin embargo, y pese a esas referencias, la jueza considera que la comparecencia de la periodista no encajaría en el marco actual del procedimiento.

“De aceptarse dicha declaración testifical, el objeto de la investigación se desplazaría sustancialmente hacia la actuación del President de la Generalitat, lo que indicó, comunicó o quién, durante las horas que comió con la testigo”, señala la resolución. Y subraya con contundencia: “Ello no es factible, dado su condición de aforado”.

No es la primera vez que se plantea la participación de Mazón en la causa que investiga los 228 fallecimientos registrados a raíz de la DANA. La propia magistrada recuerda en su auto que ya se le ofreció declarar en calidad de investigado, aunque por el momento no ha sido imputado formalmente. En esta ocasión, el foco recaía sobre Vilaplana como posible testigo circunstancial, pero la jueza vuelve a cerrar esa puerta.

En caso de que se aceptase la declaración de la periodista, continúa el auto, se le deberían realizar preguntas sobre comunicaciones telefónicas en las que no participó, y que incluso podrían referirse a “reacciones” o “manifestaciones” de Mazón sobre los dos imputados actuales: Salomé Pradas y Emilio Argüeso, exsecretario autonómico de Emergencias. “No existe, en el presente momento, dato alguno que permita afirmar que la testigo hubiera oído alguna de las conversaciones, que se hubiera puesto en alto el altavoz del móvil, o las hubiera relatado a posteriori al President”, zanja la jueza.

El criterio del Ministerio Fiscal coincide con el de la magistrada. La Fiscalía ve innecesaria la testifical de Vilaplana y considera “intrascendente” la opinión que pudiera aportar sobre la reunión del CECOPI (Centro de Coordinación Operativa Integrado) celebrada ese mismo 29 de octubre, así como sobre el papel de los dos investigados.

En otra resolución emitida también este lunes, la jueza descarta remitir una exposición razonada al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana para solicitar la imputación formal de Mazón. Esta era una de las peticiones de la acusación particular encabezada por el abogado y youtuber Rubén Gisbert, quien sostiene que existen elementos suficientes para dar ese paso.

Pero la instructora mantiene su postura: “En el presente momento no concurren los requisitos y exigencias que expresó el alto tribunal autonómico el pasado 23 de diciembre”, recuerda. Entonces, el TSJCV ya había descartado investigar a Mazón al no encontrar indicios suficientes. “La instrucción no está agotada y ha de desestimarse dicha petición”, concluye el nuevo auto.

Así, por el momento, el foco de la investigación se mantiene sobre Pradas y Argüeso, mientras la causa continúa su avance sin que la figura del president de la Generalitat entre en el tablero judicial.

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