El hospital La Paz vuelve a ser noticia debido a la gestión sanitaria de la Comunidad de Madrid. El Servicio de Urgencias del centro, mermado a nivel de reputación -no desde luego por culpa de sus profesionales- debido a cuestiones meramente sanitarias, pero también otras externas, sufre su enésima saturación.

Según una denuncia de Comisiones Obreras (CCOO), los recortes presupuestario al inicio de la época estival ha provocado un colapso en el que más de 60 pacientes tienen que esperar para ser hospitalizados y que contempla boxes duplicados, así como camas en los pasillos a la vez que el centro mantiene 400 camas cerradas.

Desde la Consejería de Sanidad reconocen el problema, pero lo limitan a un caso puntual derivado de un pico vírico que relacionan con el cambio de temperatura de las últimas semanas. Asimismo, su portavoz, Fátima Matute, niega que en la capital se lleve a cabo el cierre de camas y promete que las habitaciones que no se están utilizando irán reabriendo gradualmente; según la demanda.

Algo que "lleva pasando una década"

Los vídeos no dejan lugar a duda de lo crítico de la situación que, desde los sindicatos, aseguran, no se trata de un caso aislado como intentan convencer desde la dirección de Sol. “Es algo que lleva pasando una década” responde contundente a en declaraciones a ElPlural.com Daniel Bernabéu, presidente del sindicato mayoritario de personal sanitario, AMYTS, dentro de uno de los centros médicos más reconocidos de nuestro país.

Aconseja a la presidenta madrileña y la consejera que, como ellos, miren hacia la hemeroteca. “Igual que en Navidad el hospital sufre una sobrecarga por procesos respiratorios, durante verano pasamos semanas infernales en urgencias debido al cierre de camas”, explica refiriéndose a unos cierres “motivados porque, evidentemente, hay que dar vacaciones al personal sanitario, pero estas plazas no se suplen”.

“Nosotros lo que denunciamos es que no hay un problema puntual (…) Y lo que tampoco hay son contratos en condiciones adecuadas”, acentúa: “Porque para cerrar un contrato aprisa y corriendo para solventar ese problema ‘puntual’ no se encuentra a nadie”.  El responsable sindical en La Paz refrenda a este periódico que “nadie quiere comerse un marrón, hacerse cargo de una responsabilidad muy grande, con las condiciones que se ofrecen”.

No hay un problema puntual, y lo que tampoco hay son contratos en condiciones 

Al contrario de lo que defiende el equipo político, Bernabéu sostiene que se trata de un tema de “planificación” y que lo que ocurre ahora, sucede “todos los años”. “En verano, sobre todo durante el mes de julio porque se cierran camas cuando la gente todavía no se ha ido de vacaciones, y durante septiembre porque ya ha vuelto todo el mundo pero las camas siguen cerradas”, dicta, añadiendo que el problema “se agrava” porque “cada vez hay más gente en residencias” y “estas personas no se van de vacaciones” pero “también se ponen malas”.

Por su parte, CCOO -primero en poner sobre la mesa la situación- calcula que hay una media de entre 60 y 70 pacientes esperando a ser hospitalizados y sitúa el centro de la problemática en el mismo punto que su homólogo en el otro sindicato.

María Jesús Durán, su portavoz, ha emitido a los medios de comunicación que, además de tratarse de una cuestión reiterada en el tiempo, ésta se encuentra directamente relacionada con los “recortes presupuestarios de la Comunidad de Madrid” que “se han cebado con los permisos del personal” teniendo sobre todo consecuencias “serias” en la continuidad de los servicios.

Sanidad habla de un “aumento inusual para la época”

Aunque las voces discordantes insisten en que la situación no es muy diferente a la de todos los años, fuentes de la Consejería de Sanidad de pronuncian en términos muy distintos. “Se está produciendo un aumento de la actividad asistencial elevada, inusual para la época estacional”, difieren.

Las mismas fuentes achacan el escenario actual a un “cambio de temperatura de la última semana, así como el fin del periodo estival”, que ha “propiciado una mayor confluencia de virus respiratorios”. Atendiendo a esto, los pacientes que están ingresando serían personas de edad avanzada, con múltiples patologías y que requieren de ingreso por su estado de gravedad.

 En lo que respecta al cierre de camas que también señalan los sindicatos, desde la Consejería directamente niegan que esta medida se esté llevando a cabo. Dicen que en Madrid no se cierran camas. A la vez, apuntan que se encuentran “trabajando para agilizar los ingresos en la medida de lo posible” y que para conseguirlo “se están abriendo camas, agilizando los traslados a centros de media estancia para aquellos pacientes que requieren recuperación funcional”.