La comarca del Segrià (Lleida) ha sido la primera, tras el estado de alarma, en la que se ha tenido que volver al confinamiento. De momento, las medidas impuestas afectan a la movilidad y las reuniones de personas. Sin embargo, no se descarta que pueda llegar a ser necesario confinar en casa a los vecinos.

Así lo ha señalado la consellera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés, que ha indicado que "no podemos descartar nada".

No obstante, ha precisado en una entrevista en Rac1 que  "si se hace caso de las medidas" y se interiorizan, no debería hacer falta endurecer el confinamiento. En este sentido ha subrayado la importancia de evitar aglomeraciones y de no encadenar reuniones con más de diez personas distintas: "No es cuestión de cerrar las actividades económicas, pero si de reducir la actividad social".

Sobre el cierre perimetral, ha explicado que le preocupa más lo que pueda pasar dentro del Segrià: "No serviría de nada que marcáramos el perímetro y prohibiéramos ir a comarcas vecinas, pero dejar que dentro se transmitiera el virus".

Mínimo 15 días

En lo que respecta a la duración de la medida, Vergés ha indicado que están mirando los datos, y que harán dos revisiones profundas: una dentro de siete días y otra en dos semanas.

"Esperamos que no se tenga que alargar", ha afirmado, precisando que "14 días no son muchos", por lo que deben esperarse para hacer esta valoración.

Sobre las pruebas de acceso a la universidad ha indicado que "se podrán hacer seguro", ya que se aplicarán estrictamente las medidas sanitarias, pero ha planteado que algunos estudiantes hagan los exámenes fuera de la comarca.

Migrantes y temporeros

En cuanto a la mayor afectación del rebrote entre los migrantes y temporeros en el Segrià, ha recordado que la campaña de fruta representa multiplicar a la población, y que estas personas se mueven por toda España.

La Conselleria de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias "ha invertido como nunca en esta campaña para ofrecer más alojamientos, para dar más dignidad y más apoyo social a estas personas".

"La responsabilidad es del Estado. No sirve de nada mirar hacia otro lado", y ha indicado que si no se regulariza su situación se deja solos a los ayuntamientos.