Este domingo tendrá lugar en la localidad de Ortigueira (A Coruña), convocada por la plataforma Comida Digna XA Ortigueira una manifestación contra la administración de Alfonso Rueda por la gestión de las residencias de mayores. “Esperamos que el tema llegue de verdad al ámbito regional”, expresan a ElPlural.com voces que están disconformes, no solamente con el trato que reciben los internos del centro, sino también con la inacción de las partes.

De hecho, este periódico ha podido hablar con alguna de las personas afectadas por la situación del sitio protagonista de estas líneas, que centra los problemas en la alimentación. “La comida que nos dan no es apropiada para gente mayor, tampoco para quienes podemos comer de todo. Una cosa es que nos den comida sin sal o baja en grasa, porque entendemos que hay gente que debe seguir una dieta, y otra cosa es esto”, expresa apenado en conversación con este periódico Hipólito Pena, de 87 años.

En este sentido, deja claro que han “llamado a todas las puertas y siempre les responden desde la indiferencia más absoluta”: “Empezamos primero en el propio centro, luego en el Consorcio, después en la Xunta y en el Parlamento Gallego. Incluso a la Veladora de Pobo”.

"Comida de posguerra y que parece corcho"

El octogenario que responde al otro lado del teléfono lleva tres años en la residencia Ortigueira, aunque nos cuenta que el problema “viene de antes”. “Me dicen que antes de mi llegada era incluso peor”, indica. “Lo que comemos es propio de la posguerra. Los primeros platos, tanto caldos como sopas, absolutamente aguados en agua transparente; las cremas muy disueltos, otros platos totalmente inapetente (…) Las pastas siguen siendo muy viscosas, espesas, con una carne picada indefinida que no sabemos qué carne es”, enumera: “La carne que masticas parece corcho”.

Este periódico ha podido acceder a imágenes de los alimentos que reciben las personas de la tercera edad que se encuentran en el centro. Sin embargo, otras fuentes cuentan lo complicado de acceder obtener más fotos y vídeos en lo que cuentan como un acto de censura: “Tenemos constancia de que las trabajadoras de la residencia están presionadas en caso de que medios de comunicación se acerquen a ellas y las obligan a decir que se trata únicamente de una queja de tres usuarios y que el resto está perfecto”.

En este sentido, cuentan que el personal “aprovecha los cambios de turno” para recabar pruebas y que, aún así, no siempre es posible. “Hace cosa de una semana, grabar se ha vuelto prácticamente imposible, ya que en cuanto intentan hacerlo, una persona del catering se acerca rápidamente a hablar con ellos para distraerlos”, exponen a la vez que añaden que “también se solicitó permiso para grabar la cocina del dentro, que cuenta con un equipamiento adecuado, pero al que se ha denegado el acceso”, cuentan.

La empresa que adjudica el catering en estas residencias es Catering Culinaria, recurrente en los contratos de comida que la Xunta cierra para las residencias de la tercera edad. También en este sentido se puede decir, por lo tanto, que la región repite el modus operandi que la administración de la Puerta del Sol en tanto en cuanto la Comunidad de Madrid también ha repetido contratos con compañías que no solo criticadas, sino también multadas por el mismo motivo.

“Un representante de la empresa de catering se llegó a comprometer, ante el portavoz de afectados y afectadas y el concejal del BNG de A Ponteonova, Xorxe Gómez Rico, a mejorar este servicio, pero dicha mejora solo duró unas pocas semanas”, lamentaba el BNG, que calificaba lo ocurrido como “un episodio más  de la nefasta situación a la que el Partido Popular ha llevado a la dependencia de nuestro país, donde los intereses de empresas están siempre por encima de las necesidades y los derechos de los y las residentes”.

Tiempo atrás

La queja viene de lejos, mínimo desde agosto de 2024, pero por el momento todo sigue igual, a pesar de que el asunto ha llegado al Ayuntamiento, donde se ha presentado una moción sobre el punto que concierte estas líneas mientras que el gobierno defiende el trato: “Dicen que disponen de microondas de última generación”.

Por su parte, el director de la compañía emplazaba esta semana en palabras a la Cadena Ser que "siempre tienen en cuenta cualquier opinión o queja para que la satisfacción sea adecuada" y dice que se encuentran "evaluando y mejorando". "Hemos estado con los usuarios y hay comidas que dicen que les falta un poco de sal y otras muy ricas", indica; y califica la cuestión como poco más que aislada: "Damos comida a 7.000 comensales y solo hemos tenido quejas en estos dos centros, lo cual es igual de respetable e intentamos mejorar".

El alcalde del municipio, Valentín Calvín (PP), ha justificado en varias ocasiones la alimentación que reciben los mayores del centro de Ortigueira. En este sentido, el regidor sostiene que acudió al centro -voces críticas dicen que solo lo hizo un día- y que, por lo que él pudo comprobar, a la comida solo le faltaba sal.