La gestión de las residencias, principal foco de contagio en la Comunidad de Madrid, está siendo un auténtico quebradero de cabeza para el Ejecutivo regional. Este jueves ha trascendido el anuncio de que el PP ha delegado su competencia en el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz-Escudero, quitando así a Alberto Reyero, de Ciudadanos, la gestión de estos centros.
Este desplante ha provocado malestar entre los naranjas, que recuerdan que solicitaron ayuda del Ejército para contrarrestar la virulencia contra los mayores del coronavirus. El propio Reyero confirmó que entre las medidas que se estaban estudiando estaba la posibilidad de pedir al Gobierno la intervención del personal sanitario de las Fuerzas Armadas. Una reclamación que realizaba de forma solícita después de descubrirse que en dos residencias de la capital (Monte Hermoso y Mensajeros de la Paz) habían muerto una veintena de sus residentes.
Reyero observó que se estaba reproduciendo un patrón peligroso que ha estallado días más tardes: el virus, al entrar en las residencias, se propaga con rapidez y acaba reproduciéndose de forma especialmente peligrosa entre los ancianos, personas de riesgo ante el contagio de Covid-19.
Sus vehementes demandas, sin embargo, fueron desechadas por sus socios de Gobierno. La propia Isabel Díaz Ayuso desmintió el comunicado lanzado por el dirigente naranja, aclarando que no era una medida que estuviera “encima de la mesa”. Pese a todo, Reyero avisaba de que había que estar “preparados para situaciones críticas en todas las residencias, y por eso queremos ir dando pasos más allá: la situación cambia diariamente, y lo que ayer parecía adecuado a lo mejor mañana no es suficiente”.
Fuentes de Ciudadanos consultadas por ElPlural.com sentencian ahora que la decisión de cesar de estas responsabilidades a Reyero empezó en aquel momento. Los populares no entendieron este desplante, y se afanaron en tratar de que el Ejército no visitara las residencias cuando ya presentaban síntomas de estar totalmente desbordadas.
El propio Casado, tras hablar con Ayuso, se quejó al Gobierno de la visita del Ejército
Fue el pasado viernes cuando las Fuerzas Armadas entraron a las residencias de la Comunidad de Madrid. Un hecho que fue duramente criticado por Pablo Casado, que pidió “lealtad” al Gobierno. De hecho, el líder del Partido Popular presentó lo sucedido como un escándalo. Horas después, las Fuerzas Armadas se encontraban con “ancianos y mayores absolutamente abandonados cuando no muertos en sus camas”, según certificó el Ministerio Público.
En una comparecencia realizada a través de redes sociales y los canales de comunicación oficiales del PP, el popular, minutos después de reunirse por videoconferencia con sus barones territoriales, mostró su “extrañeza” ante el hecho de que hubiese equipos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "recabando información" en "residencias de las comunidades autónomas donde gobierna el PP" por "mandato de la Fiscalía General del Estado".
"Espero que no se esté dando prioridad a preconstituir pruebas cuando llevamos ya una semana en la cual el mandato único a nivel nacional hace que la responsabilidad sea del Gobierno de la nación", avisó.
Investigación de la Fiscalía
La Fiscalía General del Estado ha abierto diligencias de investigación sobre el hallazgo por parte del Ejército de cadáveres en residencias de ancianos, en la que se encontraban otras personas en "situaciones extremas y malas condiciones de salubridad" para determinar la gravedad de los hechos y su posible relevancia penal.