El Ministerio del Interior ha asumido la coordinación de las fuerzas de seguridad en Cataluña para impedir la celebración del referéndum, una decisión que acatará la dirección de los Mossos d'Esquadra, pero que no comparte. 

Así lo había solicitado el fiscal a la luz de los acontecimientos que se han venido desarrollando a lo largo de la semana y después de que Interior comunicara por carta al conseller de este departamento de la Generalitat, Joaquim Forn, el envío a Cataluña de unidades de Policía Nacional y Guardia Civil para apoyar los Mossos d'Esquadra en el mantenimiento del orden público.

Según ha trasmitido el fiscal jefe del Tribunal Superior de Cataluña a los responsables de Guardia Civil, Policía Nacional y Mossos, la coordinación se le ha encargado a la Secretaría de Estado de Seguridad.

Fuentes ministeriales, insisten, no obstante, en que esto no supone retirarcompetencia alguna  a la policía autonómica catalana. En lo esencial, agregan, el mecanismo de coordinación acordado es el mismo por el que a los mossos se les encomendó las actuaciones posteriores al atentado de Barcelona y Cambrils.

Del mismo modo, recuerdan que la ley orgánica de fuerzas de seguridad del Estado de 1986 contempla en su artículo 38.2 la intervención de Policía y Guardia en el mantenimiento del orden público en apoyo de los Mossos, como así Interior lo ha comunicado por carta a las autoridades catalanes para justificar el envío a Cataluña de unidades de Policía Nacional y Guardia Civil.

El ejercicio de esta función corresponde con carácter prioritario a los Mossos pero, según recoge la citada ley, sin perjuicio de la intervención de Policía y Guardia Civil cuando, "bien a requerimiento de las Autoridades de la Comunidad Autónoma, o bien por decisión propia, lo estimen necesario las Autoridades estatales competentes".