La crisis sanitaria por la peste porcina africana (PPA), detectada durante los últimos días en varios jabalíes en la sierra de Collserola (Barcelona), suponiendo el primer foco de esta enfermedad en España desde 1994, podría costarle a Cataluña 1.000 millones de euros. Así lo ha advertido el conseller de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación del Govern, Òscar Ordeig, en una rueda de prensa para informar sobre las actuaciones que está llevando a cabo la Generalitat para contener el brote, en la que ha explicado que las exportaciones de porcino suponen para la región alrededor de 3.000 millones de euros, de los cuales un tercio proceden de países de fuera de la Unión Europea (UE), para los cuales las exportaciones llevan bloqueadas desde el pasado viernes.
“Tenemos que intentar hacer las cosas bien para que esta afectación dure el mínimo posible y podamos recuperar los mercados y los proveedores, los clientes de estos más de 100 países”, ha defendido Ordeig, que también ha remarcado que actualmente Cataluña se encuentra en una alerta sanitaria en la que “se juega mucho: el ser o no ser en los próximos años”. Asimismo, ha asegurado que todos los gobiernos están observando la actuación de la Generalitat, así como su rapidez, rigor y transparencia para controlar el brote. Por esta razón, el conseller ha abogado por “hacer las cosas bien para que dure el menor tiempo posible y recuperar los mercados”.
No se han detectado contagios en ninguna granja
Además, en la rueda de prensa, el conseller ha detallado que actualmente se han confirmado dos casos (los de los dos jabalíes muertos encontrados el pasado 26 de noviembre) y que hay otros ocho posibles contagios, que se están analizando en Madrid. Ordeig ha remarcado que todos los animales encontrados eran salvajes y que no se ha detectado ningún positivo en PPA en ninguna de las 39 granjas en el radio de 20 kilómetros alrededor del lugar en el que localizaron los dos cadáveres de jabalíes contagiados.
Por lo tanto, todavía no se ha detectado ningún caso de PPA en ningún cerdo de granja, que es de los que se exporta la carne. Pese a ello, varios países como Japón o México han suspendido todas las importaciones de carne de cerdo españolas, mientras que China ha cancelado las procedentes de doce empresas de la provincia de Barcelona. Igualmente, 121 certificados sanitarios de exportación de distintos productos derivados del cerdo han quedado bloqueados.
La UME ha desplegado 117 efectivos a petición de la Generalitat
Ante la crisis por la PPA, Ordeig ha avisado de que “vienen días complicados”, en los que se debe seguir trabajando “con colaboración y movilización de recursos públicos y privados”. Para ello, este lunes se han desplegado 117 efectivos y 25 vehículos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) del Gobierno a petición de la Generalitat y en estos momentos hay cerca de 400 efectivos trabajando sobre el terreno, según el conseller. Entre estos, hay agentes rurales, policías tanto autonómicos como locales y otras fuerzas de seguridad especializadas.
Asimismo, el conseller ha agradecido a los ciudadanos que han colaborado, habiendo realizado 384 llamadas desde el sábado, derivadas a Agentes Rurales de la Generalitat, en relación con el encuentro de animales que podrían estar contagiados. En este sentido, ha pedido a la población que, si presencian cualquier animal muerto o enfermo, llame al 112.
En la rueda de prensa también ha intervenido el subinspector del área de Grupos Especiales de Agents Rurales, Lluís Pallarès, que ha señalado que se han instalado varias trampas situadas y se realizan recorridos nocturnos “para evitar que estas poblaciones salgan de la zona”. Estos son algunos de los métodos de captura masivos que Pallarès ha afirmado que se están llevando a cabo de manera que no se produzca una dispersión de los jabalíes.